Vecinos de la colonia Mariano Escobedo, manifestaron una serie de quejas contra dos yonkes, uno el denominados Yonke Even Ezer I, ubicado sobre las calles Oro y Doctor Arroyo, y el otro un deshuesadero sin nombre que está sobre la misma Oro, pero a la altura de calle Lampazos.
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Y es que los quejosos refieren que tanto las banquetas como las calles son utilizadas para abandonar carros que son vendidos para autopartes, contaminando además la vía pública por el regadero de gasolina y aceite
Desde hace varios días, los mismos vecinos señalaron que algunos inspectores del Municipio recibían dinero por parte de los dueños del Yonke Even Ezer I, para no ser molestados e incluso, aseguraron que estos mismos inspectores les daban aviso o el “pitazo” cuando habían operativos para que alcanzarán a mover los carros y no ser sancionados.
“Mire las primeras denuncias las hicimos desde principios de junio, pero venían, se metían a platicar con ellos y luego se iban sin molestarlos, hasta los trabajadores presumían que ya se habían arreglado”, dijo la señora “Mary”.
Ante esta situación, el titular de Servicios Públicos Municipales, Daniel Pando, decidió tomar cartas en el asunto y personalmente, la mañana del lunes, recorrió este sector para advertir a los dueños de los yonkes que retiren los vehículos de las calles y no obstaculicen la vía.
A los propietarios se les entregó unas notificaciones dónde se les daba un plazo de 72 horas para reubicar los “kilos”, de lo contrario, estos serían asegurados y llevados a los corralones municipales.
El funcionario indicó que seguiría realizando dichas revisiones en varios de estos negocios ubicados en la ciudad, ya que son constantes las quejas de la ciudadanía.
En un recorrido de El Heraldo de Juárez, se pudo apreciar todos los carros yonkeados sobre la calle Oro, así como en una especie de lotes baldíos, mismos que están siendo desmantelados.