La Patrulla Fronteriza en colaboración con autoridades mexicanas trabajaron en la ubicación de una vivienda utilizada como casa de seguridad para el tráfico de personas, así como del grupo delincuencial encargado de “cruzar” ilegales al vecino país.
De acuerdo con un parte informativo enviado por la U. S. Border Patrol, recabaron información sobre el inmueble que se encuentra ubicado en las inmediaciones de Sunland Park, Nuevo México y la colonia Rancho Anapra, en Ciudad Juárez.
Las autoridades fronterizas fueron alertadas luego de que se procediera al aseguramiento de un padre y su hijo, provenientes de Guatemala, que dijeron haber sido víctimas de unos “polleros” que operan en nuestra ciudad y los mantuvieron en cautiverio.
De acuerdo a sus declaraciones, los dos lograron escapar, pero lamentablemente, tuvieron que separarse.
Cuando aseguraron al menor de 17 años de edad, a la altura del Cristo Rey que conecta a Juárez con Sunland Park, notaron que este tenía varios golpes en la cara, por lo que iniciaron con la investigación, obteniendo la declaración del indocumentado que dijo que habían sido agredidos físicamente por estas personas y los mantuvieron encerrados en dicha casa.
Sin embargo, los traficante lograron agarrarlo de nueva cuenta y lo golpearon de nueva cuenta, pero por fortuna pudo escapar una vez más, sin embargo, desconoce el paradero de su padre, por lo que teme que los “polleros” lo pudieron haber lastimado o asesinado.
Minutos después, a media milla de distancia, ubicaron y aseguraron a un hombre, que les dijo que había sido separado de su hijo al escapar de una casa de seguridad en México y que al parecer su hijo había sido asesinado.
Luego de preguntar el nombre, confirmaron que se trataba el joven de 17 años, por lo que fueron reunidos en el punto de control del puente de Santa Teresa, donde lograron contactar a sus familiares.
Una segunda investigación revelo la ubicación del inmueble mencionado, donde dos hombres dijeron haber sido privados de su libertad y extorsionados con dinero, por lo que agentes encubiertos adjuntaron esta versión junto a la declaración de padre e hijo para determinar que otros centroamericanos han sufrido abuso por parte de esta misma banda y haber permanecido en esa casa.
Finalmente, el martes 15 de enero se montó un operativo binacional en la casa de seguridad, con el apoyo de la Comisión Estatal de Seguridad, localizando a una persona encerrada en la casa, misma que fue rescatada.
Al interior se localizaron varios colchones, lo que hizo suponer que en el lugar se quedaban varias personas, pero lamentablemente no se logró la detención de ningún criminal.