Ciudad Juárez, Chihuahua.- En Ciudad Juárez, también se han vivido episodios de terror en centros comerciales, un tanto similares a la matanza que dejó un supremacista blanco en Walmart de Cielo Vista, el pasado 3 de agosto.
Entre los casos que han generado pánico en la comunidad juarense, destaca la agresión contra dos periodistas en Río Grande Mall, la balacera registrada en Galerías Tec y la ejecución de un hombre en Las Misiones.
El primer caso tuvo lugar el 16 de septiembre del año 2010, cuando dos comunicadores de un medio impreso de esta localidad, fueron sorprendidos por sicarios cuando buscaban un cajón de estacionamiento en el centro comercial de las avenidas López Mateos y Paseo Triunfo de la República.
Uno de los reporteros gráficos perdió la vida dentro del auto Nissan Platina que manejaba, mientras que su compañero mal herido, corrió dentro de Río Grande, perseguido por los pistoleros que sale seguían disparando, sin importarles la presencia de decenas de familias que se encontraban dentro y fuera del establecimiento.
Un año después, el 21 de enero del 2011, clientes de Galerías Tec vivieron minutos de terror, luego de que un grupo de asaltantes se agarraron a balazos con agentes municipales, dejando como saldo dos asaltantes y un preventivo sin vida.
En una serie de videos publicados por la misma gente, se puede observar la a gustos, desesperación y miedo que vivieron niños, jóvenes y adultos, al verse "víctimas circunstanciales" de un intenso intercambio de balazos, que dejaron los pasillos del centro comercial llenos de sangre.
Todo el establecimiento de las avenidas Pedro Rosales de León y Tecnológico fue sitiado por decenas de agentes municipales, estatales y ministeriales, quienes acudieron a brindar apoyo a sus compañeros.
En el caso de Las Misiones, este hecho tuvo lugar el 1 de febrero del presente año, cuando un solitario pistolero acabó con la vida de un hombre, cuyo cuerpo terminó tirado en una de las entradas de la tienda Sanborns, destrozado por las balas.
Clientes aseguraron que la situación se convirtió en un caos, luego de que decenas de familias salieran despavoridas al escuchar las detonaciones dentro del establecimiento y que los guardias no les permitieran salir del estacionamiento, sin antes pagar su ticket en los cajeros ubicados dónde se registró la balacera.
Sin embargo, en el caso de El Paso, Texas, fueron 22 las víctimas que perdieron la vida a manos de Patrick Crusius, entre ellos un menor de 15 años, en lo que ha sido considerado el peor crimen de odio que dejó a otros 24 lesionados.