La frontera norte del México en el estado de Chihuahua, se mantiene en la mira de la opinión pública internacional, tanto por los problemas de migración como por el número elevado de muertes que se registran en las calles, mes tras mes.
Tras haber concluido el mes de marzo, archivos periodísticos y datos proporcionados por la Fiscalía del Estado en la Zona Norte, arrojan un total de 114 decesos rebasando a enero y febrero, en los que se enumeraron 108 y 96 casos respectivamente.
De esta forma, en lo que va del 2019, en Ciudad Juárez se lleva una cuenta mortal de 318 homicidios violentos, en tres meses, lo que arroja un promedio de 4 asesinatos diarios, el 80% de ellos cometidos con arma de fuego.
Lamentablemente, estás cifras rebasan por mucho las obtenidas durante enero, febrero y marzo del 2018, al acumularse 72, 43 y 56 asesinatos, según cifras mostradas por la Mesa de Seguridad y Justicia Ciudadana, reflejando un aumento de casi el 100% en estos casos.
De manera lamentablemente, las células del crimen organizado han retomado la crueldad en los ajustes de cuentas de sus rivales, tal fue el caso de dos mujeres asesinas cuyos cuerpos fueron tirados sobre las calles Valle del Edén y Anáhuac, del fraccionamiento Lomas del Valle, la mañana del domingo.
Las dos ejecutadas fueron envueltas en cobijas y según agentes de la FGE, una de ellas tenía la cabeza desprendida, además de que se cree tenían pocas horas de haber sido asesinadas antes de que fueran localizadas por las autoridades.
Estos eventos violentos también han inquietado al ramo empresarial, luego de que durante la semana pasada, el gerente del restaurante Shin Toshin, ubicado en Plaza Portales y propiedad de la priísta Adriana Terrazas, fue asesinado a balazos en medio de un festejo.
Autoridades de lso tres niveles de gobierno aseguran que todas estas muertes están relacionadas con la disputas entre el Cártel de Sinaloa y el Nuevo Cártel de Juárez, a través de sus células denominadas "Artistas Asesinos", "Mexicles", "Aztecas" y "La Línea".
Además, se especula de la presencia de otros grupos criminales en el estado, en alianza con el NCDJ, siendo estos el Cártel de Jalisco Nueva Generación y Los Zetas.