Se disputan cárteles Valle de Juárez

El Cártel de Juárez busca recuperar el terreno que le fue arrebatado por el de Sinaloa y su "Gente Nueva"

Redacción El Mexicano

  · sábado 15 de junio de 2019

Restos de cuerpos fueron descuartizados en el Valle de Juárez

Ciudad Juárez, Chihuahua.- Considerado como uno de los sectores más violentos de la Zona Norte de Chihuahua, el Valle de Juárez, también es el favorito de los cárteles para el tráfico de personas, armas y drogas, convirtiéndolo en un "botín" que actualmente se encuentra en disputa.

En menos de 36 horas, grupos criminales sembraron el terror en calles, brechas, rancherías y pueblos que conforman esta región, cobrando la vida de seis personas, tres de ellas cortadas en pedazos y sus restos esparcidos a lo largo de la carretera Juárez-Porvenir.

Y es que ahora, el Cártel de Juárez busca recuperar el terreno que por muchos años le pertenecía y que le fue arrebatado por el Cártel de Sinaloa y su Gente Nueva, durante la administración de Felipe Calderón y la afamada "guerra contra el narco".

Según archivos periodísticos, el Valle pasó a manos de la Gente Nueva y sus aliados los "Artistas Asesinos" y "Los Mexicles", cerca del año 2008, luego de erradicar de gran parte de la ciudad a "La Línea" y "Los Aztecas", que estaban al servicio del Cártel de Juárez.

Moradores de poblados como San Agustín, San Isidro, El Millón, Jesús Carranza, Praxédis, Guadalupe y El Porvenir, argumentaron en aquel entonces, que los sinaloenses contaron con el apoyo de la Policía Federal y el Ejército Mexicano, para apropiarse de estos poblados.

Por mucho tiempo, la zona estuvo en manos de Gabino Salas Valenciano, hasta que un jueves 8 de agosto del 2013, el capo murió durante un enfrentamiento con fuerzas federales, en el poblado de Praxédis G. Guerrero, aunque hay quienes aseguran que fue emboscados por el entonces titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, Julián Leyzaola.

Después, se mencionó que la familia de Gabino Salas se quedó con el control, sin embargo, fueron las pandillas de los "Artistas Asesinos" y "Los Mexicles" los que mantuvieron la operatividad de la Gente Nueva con la venta de cristal en todo el suroriente.

Sin embargo, a mediados del 2018, estos dos grupos sufrieron una ruptura, que fue aprovechada por René Gerardo Garza Santana, alias "El 300", para formar a "La Empresa", organización conformada por integrantes de "La Línea", "Aztecas" y "Mexicles", según la Fiscalía General del Estado.

De esta forma, los antiguos socios de los "AA" comenzaron a cobrar poder, creando las “Fuerzas Especiales Mexicles” a principios del 2019, después de que ambos bandos se declararan la guerra de manera pública, principalmente por el control en la venta de cristal, convirtiendo en su campo de batalla colonias como Riberas del Bravo.

Lamentablemente, el Valle de Juárez siempre fue considerado como una "derrota" imposible de olvidar para "La Línea" y el Cártel de Sinaloa, por lo que, a principios de semana, uno de sus "socios", las F.E.M. anunciaron una limpia, amenazando a integrantes de la Gente Nueva.

Fue así como la tarde del martes 11 de junio, dio inicio un tiroteo en San Isidro, San Agustín y Jesús Carranza, que cobró la vida de tres sujetos, uno de ellos señalado como chófer de transporte de personal.

Bloqueos, balazos, rechinar de llantas y caravanas de hombres armados, fue lo que vivieron pobladores por casi una hora, según sus relatos, algo que para ellos fue costumbre años atrás y que parecía fue superado.

Autoridades municipales, estatales y militares, montaron una serie de operativos y filtros de revisión en brechas, calles de terracería y sobre el bordo del Río Bravo, pero de manera vergonzosa, sicarios encontraron la forma de dejar tres cuerpos mutilados en hieleras y cajas de plástico en la Juárez-Porvenir, la madrugada del jueves 13 de junio.

Información al interior de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal indica que estas muertes pudieron ser evitadas, ya que, durante la reunión de la Mesa de Coordinación Regional para la Construcción de la Paz, celebrada el lunes 10 de junio, se alertó sobre las amenazas de "Los Mexicles", pero las autoridades minimizaron el problema.

Ahora, esta organización busca recuperar el Valle de Juárez de la mano de sus aliados para controlar uno de los principales puntos de exportación de droga hacia los Estados Unidos y que carecen de la vigilancia de corporaciones como la SSPM y la Comisión Estatal de Seguridad, encargadas del tema de prevención.