Bocoyna, Chihuahua.- El municipio de Bocoyna se encuentra en control de los grupos criminales, a tal grado que en próximos días, veinte elementos de los 45 que se encuentran laborando en la Dirección de Seguridad Pública renunciarán al cargo, por el temor de ser asesinados como ha sucedido con varios de sus compañeros, según explicó el presidente municipal, Héctor Rochín González.
El alcalde de uno de los municipios más extensos, turísticos y con mayor presencia de grupos delincuenciales, acepta que las condiciones de seguridad no se pueden esconder, porque en lo que lleva como presidente de esta región ya le han asesinado a siete elementos de seguridad, a tal grado que entre muertes y renuncias se redujo el estado de fuerza de 90 a 45 elementos en dos años.
“¿Para qué esconderlo? En San Juanito nos mataron a dos compañeros que eran policías, amigos míos, un chavalo que le decíamos Chetumal, desgraciadamente ayer fallecieron, la semana pasada también don Chava, que en paz descanse, lo mataron en la comandancia en San Juanito, y así se han venido presentando casos y casos” explicó el presidente.
Dijo que a raíz de la inseguridad que persiste por los diferentes grupos del crimen organizado en esa zona del estado, se ha cerrado una de las cinco comandancias que tenían en Bocoyna, que se redujeron de 90 a 45 los elementos y que han registrado la muerte de siete compañeros sólo por la intimidación que hacen contra la autoridad.
“Seguramente estos días vamos a tener la baja de por lo menos veinte elementos municipales, tienen temor a que les pase lo que le ha venido pasando a sus compañeros, no podemos atender todo el municipio con veinte policías para un mundo de cerca de 60 mil personas”, consideró el alcalde de Bocoyna.
Comentó que si distribuyen los elementos de seguridad a las cuatro comandancias, quedarían cinco elementos en cada instalación y como son turnos de doce horas, serían entre dos y tres elementos por comandancia, lo que no permite siquiera atender a las comunidades de todo el municipio por la falta de elementos, ni pensar siquiera hacer frente a los grupos criminales.
Héctor Rochín González dijo que existe presencia de la Comisión Estatal de Seguridad y de la Guardia Nacional, pero que su función o establecimiento se encuentra en la comunidad de Creel, por lo que recorren en lapsos cortos algunas poblaciones, pero no logran atender el verdadero problema.
“Ellos están instalados en Creel, tenemos muchas comunidades como San Juanito, Sisoguichi, la Guardia se instaló en Creel, van a San Juanito una hora o dos horas, pero se van porque no viven ahí, la gente que está mal pues muy fácil los evade y conoce del movimiento que tienen dentro del sector”, refirió.
Dijo que el municipio de Bocoyna ya no puede hacer nada para contener la seguridad, incluso analizó que el estado ya se ha visto superado ante los grupos criminales que operan en la zona serrana del estado, por lo que aceptó que existe una falla tanto de todas las autoridades involucradas como de la misma sociedad.
“Está en manos de otros gobiernos, no de nosotros, no sé qué pensarán, ni tengo idea de la forma en que se pueda componer esto, es una bronca que no está en mis manos, no sé qué hacer, está curioso el asunto, es complicado, está conjurado, el gobierno y nosotros como sociedad, dejamos que esto creciera, hay grupos que se expandieron, escucho que ni siquiera son cárteles, son células, estamos hechos de una mezcla de sangre que no supimos atenderlo, el gobierno hizo lo que pudo hacer y creo que ya está rebasado”, indicó el presidente municipal.
Por parte de los atentados que han sufrido los diferentes agentes municipales de Bocoyna, dijo desconocer el motivo, pues aseguró que él tiene una buena relación con todos los agentes y que no se encuentran en malos pasos, por lo que atribuye los hechos a una forma de intimidar o causar daños a la sociedad.
El presidente municipal dijo que en lo personal no ha recibido amenazas por parte de los grupos criminales, toda vez que él no se ha querido meter en este tipo de conflictos y tampoco busca presionar al gobierno para que resuelva estas condiciones, ya que la sierra de Chihuahua se encuentra muy “complicada”.
“Nosotros no tenemos y no nos metemos ni opinamos de los hechos, jamás he tenido amenazas, preferimos quedarnos fuera de estos conflictos, nos hemos reunido con todas las autoridades y sólo nos dicen que va mejorando y que pronto tendremos un nuevo cuartel, pero sabemos que eso va para largo”, indicó.
Te recomendamos: