En cuestión de segundos, un irresponsable conductor terminó con la vida de Ana Karen Rubio y un pequeño corazón que latía en su vientre, al brincar el camellón central del periférico De la Juventud y caer sobre el automóvil donde venía la joven mujer en el carril contrario.

La noche del viernes en el periférico De la Juventud, la transcurrida avenida se manchó de luto y dolor para una joven pareja que les reía la felicidad por la espera de su bebé. Ana Karen murió cuando de manera sorpresiva le cayó un auto encima.

Los conductores que a esa hora pasaban por el lugar no se explicaban el motivo del embotellamiento y mientras permanecían detenidos en el tráfico, enviaban mensajes a sus amigos para avisar que iban a llegar tarde y otros preguntaban en grupos de WhatsApp y Facebook del porqué las largas filas.

Las autoridades han sido muy herméticas en cuanto al nombre del otro conductor del auto que cayó sobre el auto de Ana Karen. Sin embargo, se logró saber que se llama Gerardo B., iba con primer gado de ebriedad y está detenido hasta que la compañía de seguros pague los daños.

¿Grupo, saben qué pasó en el peri, están unas filotas y no avanzo nada?, preguntó Pedro en un grupo en Facebook al que pertenece, mientras Óscar alertaba por WhatsApp a sus compañeros de trabajo del caos vial en uno de los carriles del periférico De la Juventud a la altura de la avenida Homero.

Al llegar al lugar del accidente, los dos jóvenes que mensajeaban a sus amigos, les mandaron fotos del accidente. “No manches un auto Mustang rojo quedó como lata de cerveza, todo destrozado y hay otro carro gris al otro lado, quién sabe cómo chocaron”, fue el mensaje de Pedro en el grupo de Facebook, mientras que Óscar indicó que alguien había muerto porque vio cómo paramédicos tapaban con una sábana azul al conductor del auto rojo.

La escena del accidente parecía como sacada de una película de acción, porque un auto Chevrolet Cruze estaba totalmente destrozado del frente y no tenía las llantas traseras, pero todos los que cruzaban por el lugar del choque, se preguntaban por qué el Mustang tenía aplastado en su totalidad la cabina y parte de la cajuela.

Cuando llegaron los oficiales de la Dirección de Vialidad tomaron los relatos de testigos, quienes señalaron que el conductor del auto gris, venía a toda velocidad sobre el periférico, perdió el control y al brincar el camellón agarró altura y cayó sobre el auto rojo donde venía Ana Karen, quien jamás se imaginó que en cuestión de segundos su vida y la del pequeño ser que llevaba en su vientre latirían por última vez sobre esa transitada avenida.

Los paramédicos llegaron al lugar, pero Ana Karen ya estaba sin vida, no podían hacer nada por ella. Su mano izquierda sobresalía de la sábana azul, mostrando el dedo anular donde llevaba desde hace tres años su anillo de compromiso y matrimonio.

BEBE EN CAMINO

“Agradecida con Dios por este gran regalo Daniel Eduardo González Talamantes, te amamos”, había escrito en su red Ana Karen el siete de noviembre de este año, acompañada donde aparece la fotografía de su sonografía con la leyenda escrita “baby en camino”, además de los dos perros de la pareja que también tenían un cartel de hermana mayor y hermana de enmedio.

Ana Karen conoció a Daniel Eduardo cuando tenían 16 años y desde entonces comenzaron a construir su historia juntos, primero como novios durante seis años y desde hace tres como un feliz matrimonio, bendecido por Dios.

Fue un siete de febrero de 2015, cuando la pareja de novios de prepa decidieron unir sus vidas y para el tercer aniversario de matrimonio, Ana Karen le dedicó este mensaje a su esposo: “Hola amor feliz aniversario. Hoy 3 años en manos de Dios y 9 años conociéndonos, gracias amor por siempre hacerme sentir amada, cuidada, por siempre reírte a mi lado de lo bueno y sobre todo lo malo. Gracias por nunca dejarme caer en lo más duro y hermoso que nos ha pasado. Se me llena el corazón de verte cumplir tus sueños y me emociona los que faltan por cumplir. Me hace muy feliz ser tu esposa, la madre de tus hijos y compañera de vida. A festejar gordito”.

Junto con el mensaje, la joven posteó una foto de los dos. Arriba aparecen tomados de la mano el día de la boda y abajo una que tomaron cuando tenían 16 años.

Los dos terminaron sus carreras profesionales, para luego unirse en matrimonio y comenzar a formar una familia. Ella estudió Arquitectura y trabajaba en una empresa de remodelaciones. En uno de sus contratos profesionales había participado en la remodelación del Sanatorio Palmore.

Por su carisma y buen humor, Karen siempre estaba rodeada de sus amigos y familia, compartía con sus mejores amigas de la universidad los mejores momentos, como despedidas de solteras o los cumpleaños y de igual forma lo hacía con su familia y sobre todo su esposo.

Sus amigos lloran su partida y en su muro le dedicaron palabras de despedida en la última foto que posteó, donde los hace apenas dos días anunciaba la llegada de un nuevo ser. “Karencita Dios te tenga a su lado no tengo las palabras para describir cómo me siento dios les dé consuelo a tu esposo, amigos y familiares, tres angelitos cuidarán de ellos”, reza uno de los mensajes.