CIUDAD JUÁREZ, Chih.- "Estamos cumpliendo con la disposición que marca la ley y a quien sea sorprendido en este tipo de combinaciones, pues la ley establece un procedimiento sancionador y lo estamos llevando a cabo, simplemente es la responsabilidad en el cumplimiento de la ley por parte de la Dirección de Tránsito", con estas palabras el titular de Tránsito Municipal, Sergio Almaraz, justificó la detención de Sergio Madero y Adolfo Castro Jiménez por manejar en estado de ebriedad.
Sergio Madero encargado del Fideicomiso de Pago, fue detenido el sábado 10 de noviembre cuando conducía en segundo grado de ebriedad por la avenida Ejército Nacional y Paseo de la Victoria, mientras que Adolfo Castro Jiménez, primer visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, fue aprendido cuando llegaba a su vivienda tras salir de una fiesta, durante la noche del viernes 16 de noviembre.
Tan solo durante el fin de semana, la DGTM logro asegurar un total de 112 conductores ebrios, los cuales fueron remitidos al Centro de Recuperación Cívica Total (CERESITO) tras ser sorprendidos en los operativos anti-ebrios o durante las diferentes intervenciones que realizaron los agentes viales.
A comparación con los días 9, 10 y 11 de noviembre, la corporación presentó una ligera baja en cuanto al número de detenidos, ya que durante ese periodo fuero 122 los remitidos al CERESITO por los uniformados.
Almaraz reiteró que los operativos continuarán y habrán de reforzarse durante toda esta temporada invernal, principalmente por los festejos decembrinos, qué es la temporada cuándo la ciudadanía acostumbra ingerir bebidas embriagantes y mezclarlas con el volante.
"Al corte de las 00:00 horas se turnaron al Centro de Recuperación Cívica Total 112 conductores de alto riesgo, por lo tanto seguimos insistiendo en el llamado a la ciudadanía a evitar este tipo de combinaciones que pueden ser ratificado inclusive", dijo el Director de Tránsito.
Las horas de detención varían según el estado de ebriedad entre las 24 o 36 horas, mientras que aquellos infractores que decidan ampararse, tal y como hizo el derecho-humanista, deberá pagar una multa de casi 80 UMAS, más el costo de la grúa que varía de los $300 a $500 pesos, así como el hospedaje del Corralón Municipal que aumenta día con día.