"Aún no contamos con datos que nos indiquen el tiempo aproximado de muerte ni hay identidad de ninguno de los dos cuerpos", señaló Gabriela Cota, vocera de la FGE Zona Norte, en relación con las dos osamentas localizados la semana pasada en un domicilio de la colonia Francisco Villa.
Ambos cuerpos fueron ubicados luego de que un juez del fuero común ordenara el cateo de dicha vivienda, ya que había datos públicos y fidedignos de que en ese sitio estaban los cuerpos enterrados clandestinamente.
En una primera oportunidad, los agentes de la FGE acudieron al domicilio que estaba señalado en dicha orden de cateo, sin embargo, la dueña del domicilio comprobó con documentación oficial que el domicilio que estaba buscando la autoridad no era el que venía en la orden girada por el juez.
Posteriormente, se corrigió la orden y se especificó el domicilio correcto, regresando los agentes ministeriales al sitio acompañados de empleados del área de peritajes para llevar a cabo la excavación.
Luego de ingresar al domicilio de manera legal, los efectivos de la FGE comenzaron la excavación y lograron ubicar dentro de una fosa dos osamentas, mismas que fueron trasladadas al Semefo local.
"Ambos cuerpos estaban envueltos en hule para emplayar, ese que se utiliza en los centros comerciales para embalar mercancía, además de que ya se encontraban en muy avanzado estado de descomposición", señaló Gabriela Cota, del área de comunicación social de la Zona Norte de la FGE.
La funcionaria señaló también que no ha sido posible establecer aún la fecha exacta de fallecimiento ni tampoco generar la identificación efectiva de dichos cuerpos.
"El avanzado estado de descomposición genera retrasos, sin embargo, el área de periciales ya está trabajando en los restos de ambos cuerpos para poder brindar datos más exactos acerca de los mismos", concluyó Cota.