Clientes y comerciantes de Los Herrajeros vivieron minutos de terror cuando sicarios acabaron con la vida de un joven a balazos, muy cerca del conocido Panteón Municipal.
Según testigos, el joven estaba reparando su carro Jetta en color gris, cuando hombres armados se le acercaron y comenzaron a dispararle en por lo menos 15 ocasiones.
El cuerpo destrozado por las balas quedó tirado junto al vehículo, en el cruce de las calles Nieves Acosta y Globo, entre algunos puestos de segundas que estaban ahí instalados.
Tras el ataque los vendedores de inmediato le cantaron sus mercancías y cerraron sus puestos, mientras que agentes municipales aseguraban la escena del crimen.
Según testigos, el joven era conocido en el lugar y trabajaba a veces en uno de los puestos, pero dijeron desconocer el porqué le quitaron la vida de esta manera.
Por fortuna y a pesar de la gran cantidad de balazos que le tiraron, no hubo personas inocentes lesionadas en el lugar, según informaron las autoridades.
"Está colonia ya está maldita, ya ve que van varios estos días, ahora nos tocó aquí, Dios nos ayude, todo por andan vendiendo sus cochinadas", dijo molesto un comerciante.