Dos fusiles, dos pistolas, ocho bombas molotov y casi 500 balas de diferentes calibres, fueron aseguradas en el Valle de Juárez.

A unos días de que grupos se declararon la ‘guerra’ por el control del tráfico de drogas en dicha zona, agentes de la policía municipal hicieron el decomiso.

El arsenal era transportado a bordo de dos vehículos, tripulados por personas que escaparon tras una persecución de las autoridades.

Agentes municipales que realizaban patrullajes en el poblado de San Isidro, se percataron de dos vehículos que circulaban de manera sospechosa siendo estos una Jeep Limited Comander, color negro y una Chevrolet Silverado, color blanco, cuyos conductores aceleraron la marcha al ver la presencia policial.

Así mismo se originó una persecución la cual finalizó en el cruce de las calles 16 de Septiembre y Revolución, del citado poblado, tras impactarse ambos vehículos los cuales fueron abandonados por sus tripulantes, mismos que se perdieron de vista debido a la poca visibilidad provocada por la polvareda.

Al inspeccionar ambos vehículos, se localizó el siguiente armamento: un fusil calibre 7.62x39 (conocido como cuerno de chivo), un fusil calibre .223, una pistola calibre 9 milímetros, una pistola calibre 5.7x28, una granada de fragmentación y un chaleco balístico color verde.

Además 114 cartuchos útiles calibre 7.62x39, 337 cartuchos útiles calibre .223, 15 cartuchos útiles calibre 9 milímetros y 20 cartuchos útiles calibre 5.7x28.

También 4 cargadores para balas calibre 7.62x39, 11 cargadores para balas calibre 223, un cargador para pistola calibre 9 milímetros, un cargador para arma corta calibre 5.7x28, una mochila táctica color verde y ocho bombas molotov.

Todo el armamento fue puesto a disposición de la autoridad correspondiente, para que dichas armas sean analizadas mediante estudios de balísticas forenses, para determinar si han sido utilizadas en hechos de homicidio.