Avance positivo en la negociación de la crisis en Venezuela

El gobierno de Nicolás Maduro y la oposición cerraron dos días de negociaciones en República Dominicana

Por AFP

  · domingo 3 de diciembre de 2017

La delegación del gobierno de Maduro estuvo encabezada por los funcionarios oficialistas Roy Chaderlan, Delcy Rodríguez, Jorge Rodríguez y Elias Jaua / Foto: AFP

SANTO DOMINGO, República Dominicana. El gobierno de Nicolás Maduro y la oposición cerraron dos días de negociaciones en República Dominicana sin acuerdos para atenuar la crisis venezolana, aunque reportaron “significativos avances” y fijaron una nueva cita para el 15 de diciembre.

“Gobierno y oposición declaran que se han producido significativos avances (...) El próximo 15 de diciembre celebraremos una nueva reunión de negociación, acá en Santo Domingo, con el objetivo de llegar a un acuerdo definitivo”, señalaron las partes en un comunicado leído por el presidente dominicano, Danilo Medina.

El texto subrayó la “firme voluntad” de acercar posiciones en los diálogos que cuentan acompañamiento de Chile, México, Bolivia, Nicaragua y San Vicente y las Granadinas, así como del exjefe del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.

“Estamos muy cerca de un acuerdo”, aseguró el principal negociador del chavismo, Jorge Rodríguez, sin mencionar los aspectos en que habría consenso. El funcionario ratificó la exigencia de Maduro de cesar lo que calificó como “un sabotaje salvaje a la economía y las finanzas venezolanas”.

Según dijo, ese boicot es alentado por la oposición y Estados Unidos, que prohibió a sus ciudadanos y empresas negociar nueva deuda del país y su estatal PDVSA. Por su parte, Julio Borges, presidente del Parlamento y jefe de la delegación opositora, confió en que en la próxima reunión se pueda “lograr un camino claro”.

Entre otros temas, se pidió una “solución inmediata” para el desabastecimiento de fármacos, que -sostiene- alcanza 95%.

La MUD también demanda la liberación de unos 300 “presos políticos”.

Maduro aprovechó para remarcar las divisiones en la alianza opositora en torno al diálogo, al agradecer el “espíritu colaboracionista” de los dirigentes presentes en la mesa.