Ante la emergencia que se vive en Oaxaca y Chiapas por el sismo que se registró el pasado jueves, la Presidencia de la Republica anunció que no se llevará a cabo la cena después de la ceremonia de "El Grito".
Desde el 2014, el Gobierno federal decidió cancelar la cena después de esta ceremonia, en primera instancia por medidas de austeridad, después de los ajustes presupuestales motivados por a caída en el precio del petróleo.
Este año, Peña Nieto centrará su atención en encabezar las acciones de apoyo a los mexicanos damnificados por el sismo de 8.2 grados que sacudió el sur y centro del país, pero con mayores afectaciones en Oaxaca y Chiapas donde hasta ahora se tiene registro de casi un centenar de personas fallecidas.
"La Presidencia de la República informa que toda vez que el Presidente Enrique Peña Nieto dedica su atención a coordinar y evaluar las acciones para auxiliar a la población damnificada con motivo del sismo del jueves pasado, ha dispuesto que este año, y después de la tradicional ceremonia de El Grito, no habrá cena en el Palacio Nacional" dice un comunicado emitido por la Coordinación General de Comunicación Social de la Presidencia.
Después del sismo de 8.2 grados Richter del jueves pasado, Peña Nieto ha viajado a Chiapas y Oaxaca para recorrer las zonas devastadas.
Este lunes el presidente insistió en formar un frente común para atender la emergencia y pidió a las empresas constructoras que estén dispuestas y resueltas a ser solidarias ante esta emergencia para que se sumen a este esfuerzo de reconstrucción en Chiapas y Oaxaca.
Aseveró que el Gobierno federal tiene tres ejes para la atención y la ayuda de la población: garantizar alimentación, resguardo y atención médica; realizar un censo para determinar los daños en viviendas, y la reconstrucción.
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