Durante el último año, México ha detenido un número récord de niños, principalmente centroamericanos, que viajan sin sus padres y que intentaron llegar a Estados Unidos, pese al riesgo que ello conlleva.
RECIBE LAS NOTICIAS DIRECTO EN TU WHATSAPP, SUSCRÍBETE AQUÍ
De acuerdo con los datos más recientes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), entre el 1 de octubre de 2018 y el 30 de septiembre pasado, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador detuvo a unos 40 mil 500 migrantes menores de edad que viajaban rumbo al norte sin sus padres, casi el doble a los registrados en el mismo periodo del año anterior.
Al mismo tiempo, 10 mil 487 menores mexicanos lograron llegar solos a la frontera con la Unión Americana, donde fueron detenidos o se entregaron a los agentes de la Patrulla Fronteriza.
El gobierno mexicano ha estado bajo la presión de la administración de Donald Trump para que contenga el flujo de migrantes indocumentados que intentan llegar a su territorio.
La mayoría de los menores detenidos por personal del Instituto Nacional de Migración (INM) y los elementos de la Guardia Nacional - conformada por militares, marinos y policías federales- son de origen guatemalteco, seguidos por los procedentes de Honduras y El Salvador.
En las entrevistas realizadas por los oficiales de migración tanto en México como en Estados, la mayoría de niños que se dirigían hacia el norte dijeron que sabían que el viaje era peligroso —y que si eran capturados podrían terminar en algunos de los abarrotados centros de detención que se ubican a ambos lados de la frontera estadounidense, sin alimentación adecuada, agua, ni atención médica.
Sin embargo refirieron que se arriesgarían de todos modos, buscando escapar de la pobreza, la violencia y la falta de oportunidades para estudiar o trabajar en sus países de origen.
A pesar del catálogo de restricciones que la actual administración en la Casa Blanca ha impuesto en los últimos meses contra la llegada de migrantes indocumentados, Estados Unidos experimenta también el incremento de menores que buscan hacer realidad el “sueño americano”.
De acuerdo con las cifras de CBP, las autoridades de inmigración detuvieron a un total de 76 mil 20 menores que viajaban sin sus padres en el año fiscal que terminó en septiembre, un 52 por ciento más que durante el año fiscal anterior.
De ellos, 30 mil 329 niños, niñas y adolescentes que viajaban sin ninguna compañía y que se entregaron a las autoridades estadounidenses provenían de Guatemala, seguidos por los de Honduras con 20 mil 398; El Salvador, 12 mil 21 y México 10 mil 487, lo que eleva el número total de estos niños detenidos en la región a más de 115 mil.
Te puede interesar: