Ante cúmulo de inconformidades ciudadanas contra JMAS por supuestos altos cobros, un caso sobresale: los usuarios no se explican cómo toman lectura de medidores, cuando éstos parece están en medio de una selva y exageradamente sucios.
De pagar ente 189 y 210 pesos por mes, ahora estos inconformes deberán pagar 587 en junio, lo cual consideran injusto, porque se trata de personas que viven solas, sin la mínima posibilidad de que dicho consumo sea real, ya que ni siquiera utilizan líquido para riego de zonas verdes, las cuales no tienen.
Aceptaban que pudiera tratarse de una equivocación de los lecturistas de JMAS, pero cuando se percataron de que la tapadera de la caja que protege el medidor ni siquiera la habían levantado por estar en medio de basura y maleza muy crecida, y al interior demasiado sucia, lo cual impide observar con claridad numeración del consumo, aceptaron exponer el caso, no para generar conflicto, sino para solicitar a la dependencia honestidad en la facturación.
Para que quedara constancia del hecho, se permitió tomar imágenes del medidor y del recibo. Estos y otros usuarios afectados insisten en que si les van a cobrar el agua por rangos o aproximados, no tiene caso que la misma dependencia coloque medidores cuando se contrata el servicio y los venda si se dañan o roban a razón de 520 pesos por unidad.
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