La cantidad de migrantes que se encuentran en la Estación de Bomberos #8 se duplicó a 88 las personas que amanecieron ayer jueves, destacó el director de Derechos Humanos del Municipio, Rogelio Pinal Castellanos.
Expuso que la tarde del miércoles llegaron varios grupos de migrantes a la Estación de Bomberos, por lo que se saturó el espacio destinado para ellos.
Los migrantes son originarios de Cuba, El Salvador, Guatemala y Honduras.
El funcionario municipal dio a conocer que ya ofrecieron a la Casa del Migrante el apoyo con personal del municipio, entre ellos, médicos y sicólogos; no obstante, están en espera de una respuesta del personal del albergue para ver si aceptan la propuesta.
El martes pasado la dirección de Derechos Humanos del Municipio trasladó a 43 migrantes a la Estación de Bomberos ubicado en la calle Barranco Azul y Eje Vial Juan Gabriel desde el exterior de la Casa del Migrante debido a que no había lugar para atenderlos.
Ante la negación de la Casa del Migrante de aceptar más extranjeros, el municipio contempla habilitar el gimnasio “Kiki” Romero para albergar a los migrantes que vayan llegando a la ciudad, con el fin de evitar que duerman en la calle, según información extraoficial.
Pinal Castellanos insistió que están planteando al albergue que se encuentra en la colonia Satélite ver la forma de poder ayudar en vaso a las necesidades que tienen, con la finalidad de tener a todos los migrantes en un solo lugar.
“Nosotros como municipio nos estamos ocupando en atender la situación de los migrantes independientemente de que sea responsabilidad de quien sea, el presidente está ocupado en esto”, afirmó.
Explicó que están en pláticas con la administración de Casa del Migrante para ver si acepten la ayuda del municipio con personal para atender a los migrantes.
La propuesta de la presidencia municipal es ofrecer apoyo a la Casa del Migrante con 10 personas por turno que incluye dos médicos, un psicólogo y personal operativo para apoyo de limpieza y cocina.
Expuso que Casa del Migrante no quiere que sea nada más una ayuda momentánea, porque la labor que realizan es algo maratónico con los pocos recursos humanos que tienen.