Ciudad Juárez, Chihuahua.- Los cerca de 4 mil 400 cubanos que residen en Ciudad Juárez, poco a poco, se han ido mudando de la Zona Centro de la ciudad a otras colonias del poniente, como la Bellavista, Altavista, Barrio Alto e incluso hasta la Galeana, Fronteriza, Guadalajara, Anáhuac y Leyes de Reforma.
Patricia Carrillo, quien vive en la Bellavista, cerca del gimnasio Josué Neri Santos, señaló que a lo largo desde mediados de junio se podían ver a varios migrantes provenientes de la isla, caminando por la nueva Plaza Centro Mall, e inclusive algunos preguntaban por casas o cuartitos de renta.
Diana Solís, quien vive en la Leyes de Reforma, manifestó que hace unos días, cuando compraba unas cosas en una tiendita de abarrotes de la calle Velarde, llegaron dos parejas de cubanos que también buscaban casas de renta.
"Carlos", quien vive en el Hotel Río, señaló que para algunos de sus compañeros se les empieza a hacer caro pagar de 300 a 500 diarios por habitación y muchos decidieron mejor rentar "algunos cuartitos, para ahorrarse algo de dinero.
Por lo general, en una habitación de hotel viven entre 4 y 5 personas que, al mes, gastan cerca de 9 mil pesos solo en renta, sin contar alimentación, lavandería y otros servicios que les resultan necesarios, como el transporte.
Actualmente, el precio de renta en una habitación o vivienda del primer cuadro de la ciudad, varía entre los 1 mil 500 y 2 mil 500 pesos aproximadamente, lo que les representa un ahorro promedio de 7 mil pesos al mes, si logran conseguir una casa de renta.
Hace unos días, Juan Fierro, Pastor del templo El Buen Pastor, de las calles Esmeralda y Mariano Escobedo, dijo que algunos de los migrantes cubanos que se encontraban albergados en su iglesia, decidieron rentar algunos cuartitos en los alrededores, para esperar su cita ante las autoridades norteamericanas.
Según el Consejo Estatal de Población, existen 5 mil 500 migrantes enlistados y en espera de cruzar para su asilo, de estos el 80% son migrantes, aunque muchos otros han decidido probar suerte en otras ciudades fronterizas ante la desesperación.