Ciudad Juárez, Chihuahua.- A nueve años de que un agente de la Patrulla Fronteriza asesinó a un adolescente juarense que jugaba en el río Bravo, familiares de la víctima acudieron al lugar para recordarlo.
Justo donde el cadáver de Sergio Adrián Hernández Guereca, quedó tendido al recibir un disparo de arma de fuego un 7 de junio del año 2010, sus deudos colocaron ayer un dibujo de dicho menor, quien en aquel entonces contaba con 14 años.
Para recordar la tragedia que los enlutó, los parientes de la víctima también llevaron un grupo de matachines, quienes danzaron en honor de la virgen de Guadalupe, a quien solicitaron su intercesión por el alma de Sergio Adrián.
La presencia del grupo llamó la atención ayer, sobre todo porque se la expresión se realizó en el margen del río Bravo, bajo el denominado Puente Negro, por donde cruza el ferrocarril entre Juárez y El paso, Texas.
En la misma área donde ayer estuvo Guadalupe Guereca, cayó su hijo, víctima de un balazo, disparado por un oficial de la ‘Migra’.
Hernández Guereca y cuatro de sus amigos se paseaban por el río Bravo, ese 7 de junio. Eran estudiantes que iban y venían jugando de una nación a otra. Según un video captado por testigos, fueron sorprendidos por un agente de migración de Estados Unidos.
En las imágenes se aprecia cómo los muchachos corren hacia el lado de México, pero uno de ellos es capturado por Mesa Jr., el agente que en aquel momento tenía siete años de servicio alegó que Adrián le arrojó piedras para intentar rescatar a su amigo. En el video nunca se aprecia la agresión, pero sí se ve cuando el oficial saca su arma y dispara en tres ocasiones contra el adolescente, quien cae sin vida sobre el cauce del río Bravo.
Las autoridades de aquel país absolvieron a Jesús Mesa Jr., porque consideraron que al no haber víctima en territorio de EU no había delito que perseguir.