Con la llegada del semáforo naranja, que permite atención a clientes dentro de los establecimientos de comida, renace en parte el optimismo entre empresarios del ramo gastronómico, pero aún falta la clientela que haya superado temores para afirmar que la nueva normalidad está en marcha, opinaron representantes de dos de los restaurantes más emblemáticos de Ciudad Ahumada.
Sin embargo la apertura sigue siendo restringida, por tal razón, tanto en los restaurantes Óscar´s y Arizona se prepararon para respetar medidas preventivas para poner el ejemplo a clientes en cuanto a medidas sanitarias.
A partir de hoy lunes, ambos negocios, abrieron totalmente sus puertas y la felicidad no fue exclusiva de propietarios, empleados también manifestaron beneplácito por volver a la actividad, aunque por el momento sea escasa y esto implique que la capitalización tardará aún mas, por lo menos hasta lograr que la clientela regrese como hasta antes de implementarse la contingencia, coincidieron Rosa Isela Mares Carrillo, propietaria del Óscars´s y Heriberto Arroyo Urtuzuástegui, administrador del Arizona.
En plática por separado con ambos, coincidieron que operarán al 50% de su capacidad en cuanto clientes, para respetar la sana distancia, uso de cubrebocas, antibacteriales para manos y tapetes sanitizantes, para generar confianza a la clientela y por supuesto ente el personal.
Fueron tres meses donde predominó la descapitalización, toda vez que se siguieron pagando salarios en porcentaje menor y con ingresos mínimos, pues la gente no está acostumbrada a comprar comida para llevar, señalaron ambos.
En ambos caos, los entrevistados aseguraron operaran al 50 por ciento de su capacidad, el Arizona, por ejemplo, con aforo para 110 personas, se permitirá hasta un máximo de 55 con la debida distancia, señaló Arroyo Urtuzúastegui; en el Óscar´s con 48 años de operaciones, toda vez que fue abierto en 1972 por don Óscar Mares Ramos, la actual propietaria, Rosa Isela Mares Carrillo, el aforo en tiempos normales es de 70, ahora sería de entre 30 y 35 comensales.
Ambos volvieron a coincidir, en que la capitalización va a ser lenta, sin contar ganancias, solo para recuperar parte de lo invertido en salarios, ya que no hubo apoyo ni estatal, ni federal, mucho menos municipal. Lo que si hubo fueron ofrecimientos de préstamos, el cual no se utilizó porque de todas maneras habría que cubrir parcialidades y si la clientela no llega pronto, entonces se tendría otro problema.
Lo que cabría por el momento hacer para promocionar la reapertura, es que tanto Federación como Estado establecieron campañas turística y comercial para que paseantes recobren confianza, de otra manera, ninguna empresa del ramo podrá subsistir si la situación se prolonga otro mes, dijo Rosa Isela Mares.
Precisó que en su negocio, ninguna empleada fue despedida, se les pagó menos salario, pero hay que recordar que el salario de ellas (cocineras y meseras) se completa con las propinas que obtienen de los comensales, entonces la situación aún no es del todo positiva y sin apoyo oficial, definitivamente menos, puntualizó la empresaria.
En los dos restaurantes, geles antibacteriales, tapete sanitizantes y cubrebocas es obligatorio utilizarlos por toda la gente que ingrese a los locales.
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