Ciudad Juárez, Chihuahua.- Representantes de la maquiladora Lear Corporation, planta Ahumada, mencionaron que no se le negó la atención médica a una mujer que estuvo enferma dentro de sus instalaciones, como se quejó un grupo de trabajadores de la empresa.
Según la queja, dicha obrera sufrió infarto y personal de la maquila no le brindó el auxilio necesario, por lo cual puso en riesgo su integridad física.
En contraparte, al verificar la información con el asesor de la empresa Lear Corporation, Juan Ubaldo Benavente, refirió a El Heraldo de Juárez que no fue infarto, sino presión arterial alta y se le canalizó primero a enfermería de la compañía y posteriormente al hospital del Seguro Social de dicho municipio, donde la dieron de alta en menos de una hora, igualmente al estabilizarle la presión.
A su vez, mencionó que Nora González Vargas, de 44 años, residente del ejido Benito Juárez y empleada de la maquila, manifestó a la entrada a su turno comprendido de 6:00 de la tarde a 6:00 de la mañana, que le dolía la cabeza, por lo cual personal de enfermería detectó que presentaba presión arterial alta.
Agregó que la propia obrera mencionó que no padecía regularmente de alta presión y pese a que se le ofreció que se retirara a su domicilio, ella optó por quedarse a laborar.
Ubaldo Benavente dijo que González Vargas estuvo trabajando y fue hasta las 3:30 horas del día siguiente, el martes 23 de junio, cuando dijo sentirse mareada y se le trasladó a la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social ubicada en Ahumada, a bordo de una ambulancia de URGE.
Una vez en el nosocomio, alrededor de las 4:10 horas, un médico le detectó nuevamente presión arterial alta, pero nunca se habló de un infarto o preinfarto, ya que además nunca perdió el conocimiento.
Tras estar unos 40 minutos en el hospital, la llevaron en auto particular a su domicilio, indicó el asesor de Lear.
Señalaron que la empresa cuenta con área de enfermería permanente, sobre todo a raíz del riesgo de que personal del lugar presente síntomas de Covid-19.
Los quejosos dijeron al Heraldo de Juárez que el mismo día de los hechos pero por la tarde-noche cuando iniciaba el turno laboral, realizaron un plantón para exigir presencia de médico y enfermera, fructificando este movimiento con la contratación una enfermera que está presente durante el turno vespertino-nocturno de 12 horas.
Tuvimos que hacer dicho paro, porque de otra manera, los representantes locales de Recursos Humanos no movían ni un dedo para atener exigencias de contar con médico, por el contrario, pretendían que un guardia de seguridad hiciera las veces de enfermero, ante lo cual todo el personal del turno se opuso, mencionaron.
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