Ciudad Juárez, Chihuahua.- Julio César Hernández, es un migrante que fue deportado a esta frontera hace más de un mes y quien actualmente, ha logrado sobrevivir en un subterráneo.
Yo estoy bien, aquí me dieron la oportunidad de vivir mientras junto un dinerito para rentar un cuarto expresó
El señor de 54 años, nació en un rancho llamado “Los Carrizales”, en el estado de Veracruz, sin embargo, ante la pobreza que hay, debido a que el cultivo de caña y maíz ya no dejan, decidió ir en busca del sueño americano, aquel que solo le duró seis meses.
En Houston, el señor Hernández se dedicaba a realizar cualquier trabajo de jardinería, aunque también, en ocasiones instalaba techos, hasta que un día, lo encontró migración y lo deportó.
Nos deportaron a mi y a varios, nomas que los otros se fueron para otro lado, yo sí me quedé aquí porque no traía nada de dinero mencionó.
Ahora, vive bajo los escombros de un edificio que fue demolido, precisamente donde se citó el Hotel Plaza, en la avenida Adolfo López Mateos y Benjamin Franklin.
Durante el tiempo que lleva viviendo en Ciudad Juárez, ha logrado conseguir un poco de herramienta para seguir haciendo trabajos de jardinería, lo cual, le ha ayudado a juntar unas cuantas monedas para poder comer.
Diariamente, el señor Hernández tiene que bajar unas escaleras de madera que ha colocado para llegar al subterráneo que ha acondicionado como su hogar.
En este lugar casi oscuro, al cual solo le entra poca luz natural por el hoyo que da acceso al subterráneo, ha colocado una cama hecha de cajas plásticas para verdura.
En ocasiones, cuando logra que le vaya bien en el trabajo, consigue rentar por un día, un cuarto en el Centro de la Ciudad. Allí aprovecha para bañarse y descansar bien.
Su misión, es poder conseguir un trabajo estable que le dé para poder regresar en Navidad a su estado, y volver a ver a sus padres y hermanos. “Estoy viviendo una situación pesada y lo que quiero, es volver a estar con ellos”, señaló.
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