Ciudad Juárez, Chihuahua.- Mientras miles de latinoamericanos cruzan fronteras en busca de una mejor vida, otros la atraviesan para mejorar su apariencia física a un costo más accesible. Tal es el caso de Laura Ávila, una joven residente de Dallas, Texas, quien decidió someterse a una cirugía de nariz en la clínica Rinocenter, en Ciudad Juárez, el pasado 30 de octubre, con el fin de mejorar su apariencia física.
La cirugía estaba programa para durar cuatro horas, sin embargo jamás se llevó a cabo, pues al momento de colocar la anestesia, la joven sufrió un paro cardiorrespiratorio, por lo que se suspendió el procedimiento estético, según el doctor Fernando Martín Gamboa, representante en la frontera del Colegio de Cirujanos Plásticos.
Tras algunas investigaciones de la Fiscalía y del Colegio de Cirujanos Plásticos, se ha determinado que algunos integrantes del equipo quirúrgico que pretendía realizar el procedimiento no contaban con las especializaciones correspondientes, pues el médico que operaría a Laura únicamente contaba con la especialidad de otorrinolaringología, el cual no está capacitado para realizar procedimientos estéticos.
“Sabemos que todas las operaciones tienen un riesgo, sin embargo en el Colegio estamos trabajando para realizar cirugías plásticas seguras, reduciendo cualquier riesgo posible; Fiscalía ya se encuentra trabajando en el caso de investigación y ya ellos determinarán si fue una mala práctica, una negligencia médica o una reacción de la paciente”, afirmó el doctor Gamboa.
La titular de dicha clínica, Judith Hernández, únicamente cuenta con licenciatura como cirujano dentista y uno de los doctores de Rinocenter, Alfredo Romero, sólo con el título de médico cirujano, por lo que ninguno de los dos está capacitado para trabajar en una clínica de procedimientos estéticos; al momento de que personal de El Heraldo de Chihuahua intentara contactaros, ambos se encontraban fuera, especificando que Alfredo regresaría a Chihuahua a finales del mes de noviembre.
