En respuesta a la inconformidad de vecinos de la zona centro que exigieron el miércoles, a través del diputado Omar Bazán Flores, mejor servicio de JMAS, el presidente local del organismo estatal, manifestó ayer: ¨la dependencia a mi cargo, trabaja y lo hace bien, peo es imposible dar solución a los múltiples problemas de manera instantánea, todo tiene un proceso y nada se soluciona como si existiera una varita mágica¨.

En relación al incremento a los niveles de aguas negras en registros, mismos que generaron mal olor en diversas zonas y emanación mínima en otros puntos, Juan Antonio Estrada Amaya puntualizó que la cantidad, tal vez exagerada en pozos de visita fue premeditado, como se hace en cualquier ciudad del estado y del país, para poder sanear el cárcamo, la descarga de agua residuales en el cárcamo, se tiene que taponear forzosamente para poder limpiar con maquinaria y a mano el ¨pozo del cárcamo¨ de 12 metros de profundidad por 6 de diámetro.

¨Siempre que se limpia, se taponea el tubo de descarga, los niveles de registros suben, es un problema temporal para la ciudadanía, pero –subrayó- tiene que hacerse, si no como se limpia (despegan lodos y otros desechos) pegados literalmente en el fondo del pozo¨.

Al terminar saneamiento, se retira taponamiento, todos los registros bajan su nivel…y es increíble lo que llega al cárcamo a través del drenaje: pedazos de madera, pañales desechables, trapeadores sin palo, hasta utensilios de cocina como coladeras, cucharas que no llegan al drenaje por si solos, gente indolente abre tapaderas y los arroja, esto se llama inconsciencia. Los críticos de JMAS y ciudadanía inconforme deberían ser mas prudentes en sus acusaciones, aseveró.

Agregó que desde hace dos semanas, con 12 empleados operativos, JMAS tiene que dar mantenimiento al pozo #2, saneamiento del cárcamo, reparar fugas, cumplir con nuevos contratos, toma de lecturas, distribución de recibos, hasta llamar la atención a gente que se descubre registros para arrojar todo tipo de desechos, ¨como sucedió hoy mismo con un empleado municipal a quien se detectó arrojando líquidos extraños al drenaje, la gente no tiene porque saberlo, pero ahora si se hace público porque es injusto que solo haya crítica negativa contra JMAS, cuando en realidad se hace mucho con lo que se tiene.

¨Invitaría yo a la ciudadanía a colaborar con JMAS pagando puntualmente para que haya recursos para mejorar aún mas el servicio que se ofrece¨, señaló.

La limpieza del cárcamo se llevó a cabo con la colaboración de JMAS de Ciudad Juárez que proporcionó el camión vactor y empleados, mas trabajadores locales, durante dos días, mas otro e preparación para que bajara el nivel de agua residual, de otra manera no habría manera que uno de los empleados bajara al fondo pozo a despegar lodos y desechos adheridos en el fondo.