En entrevista, Guillermo Seain, titular en turno de la Mesa de Seguridad y Justicia Ciudadana, lamentó que desde el interior del Centro de Reinserción Social Estatal No. 3 se sigan dando las órdenes para asesinar personas en las calles de Juárez.

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El activista recalcó que esto no es nada nuevo, ya que se continúa viendo que el CERESO sigue siendo un cuartel de mando para el crimen organizado, por lo que urge que las autoridades hagan su trabajo al interior.

“No es una problemática nueva o algo novedoso, pero si es un gran reto para las instituciones y creemos que los centros de rehabilitación social deberían de ser eso, centros de rehabilitación social y no oficinas de mando”, dijo.

Sin embargo, Guillermo Seain dijo confiar en que no se agrave está problemática, como en años atrás, cuando estaba bajo el control del Municipio el CERESO y era dominado por las distintas células delictivas que operan en esta frontera.

Insistió que la responsabilidad debe de permanecer en el Estado, pero considera necesario que realmente se certifique y se de una depuración al interior, además de que se deberían de revisar las políticas al interior del penal, para ver cómo es que existe comunicación de los internos al exterior.

Ante esto, queda una gran interrogante de la forma en que ingresan aparatos celulares a las celdas y si hay contubernio de los custodios con los criminales para permitir está situación.

Por su parte, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal ha guardado silencio en torno a este tema y solo se han limitado indicar, por medio de Comunicación Social, que habrán de esperar la investigación de la Fiscalía de Distrito.

Cabe señalar que desde el 2018 la Comisión Estatal de Seguridad o SSPE, tomó las riendas del CERESO, en una estrategia de Gobierno del Estado por controlar a los grupos delictivos y sus cabecillas, desde el interior del reclusorio.