Gregori Rivas es un venezolano que se acercó al punto 36 del muro fronterizo y estuvo analizando si entregarse a la Patrulla Fronteriza, pues dice que todavía no sabe sobre compañeros de él, que se entregaron hace una semana.
El venezolano lleva tres meses dentro de México y dos en Ciudad Juárez y ha conseguido empleo, es decir comenzó una vida en esta frontera.
Sin embargo, su meta es llegar a Estados Unidos, en especial a San Antonio, pues ahí está su patrocinadora.
"Está difícil la situación, unos dicen que sí los reciben, pero en realidad nadie sabe qué está pasando allá adentro", indicó el venezolano.
Su mayor temor es que lo saquen por otra frontera y luego tenga que venir otra vez a Ciudad Juárez y nuevamente empezar a buscar trabajo y estabilizarse.
"A mí se me hace muy raro que de repente estén aceptando tanto venezolano otra vez, o será que los meten y los van a sacar a México en más días", dijo Rivas.
Contó que él ha estado buscando información de formación en las páginas de la Patrulla Fronteriza y ahí dice que lo estarán regresando.
"Está de pensarse, no quiero hacer más travesías, arriesgando la vida, aunque la aplicación CBP One no funciona", expresó el venezolano.
Finalmente, decidió esperar está semana a ver si logra comunicación con sus conocidos que ya cruzaron desde la semana pasada, ya que otro rumor es que aceptan familias y él está sólo en esta ciudad.