Del 2023 a la fecha se han detectado alrededor de seis establecimientos residenciales en atención a adicciones, operando de manera irregular y entre los aspectos que han encontrado, es que no cuentan con registro, sobrecupo y sin plan de trabajo.
En los 34 establecimientos que operan de manera regular en esta frontera, se atienden alrededor de 700 personas, informó la doctora Lizeth Gutiérrez Perea, quien tiene a su cargo la jefatura zona norte de la Comisión Estatal de Atención a las Adicciones.
“Hemos encontrado centros de todo, muchos con sobrecupo, muchísimos usuarios con espacios muy pequeño o hay centros, entre comillas, que no tienen un plan de trabajo para el trabajo corrector de las adicciones, se vuelven puras terapias espirituales sin tener también una base científica para poder apoyar, una cognitiva más bien, para apoyar a los usuarios”, mencionó la doctora Gutiérrez Perea. Es lo más común, pero hay de todo”, agregó.
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“Puede ser a través de la denuncia o a veces nosotros en los recorridos que damos, de pronto nos encontramos, este centro no lo reconocemos y es como nos damos cuenta”, explicó.
La doctora mencionó que en los centros que operan de manera regular se atienden aproximadamente 600 personas.
“Realmente sí lo tenemos ahora sí que muy distribuidos, que se concentren en una sola área no. Tenemos desde la Altavista, La Montada, hasta Tierra Nueva, por Riberas, hacia Los Kilómetros o tan cerca como a tres cuadras de aquí (por la Paseo Triunfo y López Mateos); sí están distribuidas en toda la ciudad”, añadió.
Con respecto a los establecimientos residenciales que operan de manera irregular, dio a conocer que en el 2023 fueron alrededor de 3 y en este año 3 más.
“Bajo denuncia en el trabajo irregular, cuando se hace esa detección, por parte de nosotros siempre se acude si hay realmente usuarios en tratamiento de adicciones, tratamos de darles otras opciones a centros que sí están regularizados, donde puedan acudir a llevar su tratamiento”, señaló.
