Por segunda ocasión, en menos de una semana, el colector que lleva el agua residual hasta la Planta Tratadora de Laguna de Patos se obstruyó, generando un nuevo brote de aguas residuales en el fraccionamiento Villas de Alcalá.
Apenas el jueves pasado, se había realizado una limpieza en este mismo colector tras un desbordamiento similar en calles del fraccionamiento Senderos de San Isidro.
En esa ocasión, se retiraron del colector 16 llantas, seis cubetas de 20 litros, cinco rejillas de plástico, 15 alfombras y hasta una guitarra, entre otros objetos que generaron el taponamiento.
El nuevo taponamiento, reportado el miércoles, ha generado una laguna de aguas residuales en la calle Villas de Alcalá, donde ya se había realizado un operativo de limpieza en noviembre pasado por parte de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS).
El ingeniero a cargo de las obras reportó que la situación se agravó debido a que una empresa que trabaja en la reparación de la calle principal del fraccionamiento quebró accidentalmente las tapas de las alcantarillas, lo que provocó que gran cantidad de tierra terminara en el drenaje.
Las cuadrillas y máquinas vactor de la JMAS trabajan en el sector para solucionar el problema lo antes posible.
Sin embargo, la JMAS insiste en hacer un llamado a la población para que no arroje basura ni desechos al drenaje.
Se mencionó que estas conductas son las que provocan los taponamientos y brotes de aguas residuales que afectan a miles de vecinos.