De aprobarse la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas se generaría un incremento considerable en demandas, informó la licenciada Cristina Cazares, quien también destacó que se tendrían que ajustar esquemas de trabajo y los contratos individuales con el fin de evitar futuras demandas.
“Ese es un tema que un sigue en la mesa, ya que si bien la legislatura pasada ya contaba con un dictamen en este sentido, el proyecto quedó desechado al concluir el periodo de sesiones, por lo que la también denominada reforma de las 40 horas debe iniciar su trámite desde cero, es decir, desde la presentación de iniciativas”, mencionó la licenciada.
“Que implicaría obviamente una reforma de cajón constitucional así como a la ley federal del trabajo”, añadió.
Cazares mencionó que esta reducción tendría muchos efectos e impactos en diferentes áreas, pero principalmente para los patrones.
“Tiene muchos efectos e impactos en diferentes áreas, sobre todo para los patrones, quienes tendrán que ajustar sus esquemas de trabajo y por ende más pago de horas extras y demás”, señaló.
“Por otra parte, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público deberá establecer en el proyecto de presupuesto de egresos inmediato siguiente un sistema de subsidios compensatorios a empresas que se pudieran encontrar comprometidas financieramente con la reducción de la jornada, específicamente en relación a las MiPymes, etcétera”, explicó.
Destacó que a los abogados les llegarán muchas más demandas y se tendrán que ajustar los esquemas de trabajo y contratos individuales.
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“Y para nosotros como abogados, se vienen muchas más demandas ya que ni siquiera en cuestiones como la seguridad social es un tema que se ha podido regular, adaptar al patrón a este nuevo cambio va a ser algo difícil. Y hablando como abogada patronal pues se tendrán que ajustar los esquemas de trabajo, contratos individuales de los trabajadores con el fin de evitar futuras demandas”, mencionó.