La mañana del jueves, la Red Mesa de Mujeres conmemoró el aniversario número 11 del cobarde homicidio de la activista Marisela Escobedo, madre de Rubí Marisol Frayre, quien fuera asesinada en el 2008 por su esposo, Sergio Rafael Barraza Boca Negra.
Con una ofrenda floral, madres de familia e integrantes de la Red Mesa de Mujeres honraron la memoria de Marisela, cuyos restos descansan en el panteón Jardines Eternos, ubicado en la colonia Satélite.
Durante la ceremonia, las activistas cargaron una enorme manta con las imágenes de Marisela Escobedo y de su hija, cuyo caso causó consternación a nivel mundial.
Desafortunadamente, Marisela fue asesinada en su intento por exigir justicia a las autoridades por la muerte de su hija, al exterior de Palacio de Gobierno, en la capital del estado, el 16 de diciembre del 2010, a la edad de 52 años.
Acompañada por su familia, la afligida madre mantenía un plantón al exterior del edificio gubernamental y en aquella ocasión fue detenido como supuesto responsable un integrante de la célula delictiva de Los Aztecas.
En cuanto al asesino de su hija, este se integró a la organización criminal de Los Zetas y según las mismas autoridades, murió en un enfrentamiento el 21 de noviembre del 2012 en Zacatecas.
Rafael Barraza había sido absuelto por la justicia chihuahuense, a pesar de que él aceptó su culpabilidad en el homicidio de Rubí, lo que orilló a la señora Marisela a buscar justicia a toda costa, aunque esto le costó su vida.