“Cruces por La Justicia; Ni una más”, fue el emblema de la caravana que realizaron decenas de mujeres el pasado sábado desde el Umbral del Milenio hasta la Fiscalía General del Estado, donde se colocaron tres cruces y terminaron en el Campo Algodonero.
Fue parte de las actividades conmemorativas al Día Internacional de la Mujer, del pasado 8 de marzo, en las que se exige justicia, ante feminicidios, desapariciones y maltrato, además del respeto hacia la mujer.
Desde el Umbral del Milenio, decenas de personas iniciaron la caravana para reclamar justicia y la búsqueda de miles de mujeres desaparecidas.
Honraron la memoria de las víctimas mencionando sus nombres afuera de la Fiscalía General del Estado, donde además colocaron tres cruces.
En su mayoría iban vestidas de negro con morado y con pancartas con diferentes consignas; “Somos la voz de las que ya no están”; “Sin Ellas No estamos Completas”.
En los vehículos escribieron la palabra “Ni Una Más”, además llevaban una fotografía de alguna víctima y una cruz. Las mujeres iban vestidas de negro y morado y mostraron su apoyo a las madres de las jóvenes victimas.
La caravana concluyó en el Campo Algodoneros, lugar donde fueron localizados varios cuerpos de mujeres, en noviembre del 2001.
Fueron más de cuatro mil mujeres las que participaron en las diferentes marchas, manifestaciones, caravanas conmemorativas al Día Internacional de la Mujer.
“El clamor de justicia, el que las mujeres salgan y quieran externar que quieren vivir una vida libre de violencia, que se acerquen familiares de víctimas y pedir la voz, es exigir y cada vez, como ahora que vimos una marcha tan grande, se habla de 4 mil mujeres por lo menos, que salen a decir que quieren vivir una vida libre de violencia”, destacó Yadira Cortés de la organización Red Mesa de Mujeres.
“Todas estas expresiones y cada carita que vemos ahí es seguramente una mujer que vive, vivió o sabe de otra está viviendo violencia, por eso salimos, si no se siente, si no se vive, difícilmente se sale”, agregó.
Yadira Cortés resaltó que la sensibilidad ha llegado a la ciudadanía, a las mujeres, ya que salen a gritar, a exigir el derecho que tienen a vivir una vida libre de violencia.
“La convocatoria a toda la ciudadanía, sumense podemos salvar vidas“. “Me decía el grupo de jóvenes de Riberas del Bravo, porque no hacemos una marcha allá, haremos algo ahí, que no se nos acabe el mes sin llevar a cabo esa actividad, el que ellas lo pidan nos habla de la necesidad, debido a la violencia que hay ahí”, señaló.