El penoso error en la entrega de un cuerpo a la familia de un menor desaparecido, dio pie a una serie de señalamientos en contra de la Fiscalía General del Estado y el Servicio Médico Forense, ya que al parecer, no es la primera ocasión que ocurre algo similar.
Algunos de estos casos se dieron hace algunos años, dónde las madres de mujeres desaparecidas vivieron en carne propia lo que es recibir unos restos que no fueron los de sus hijas, equivocaciones que marcaron sus vidas.
Uno de estos casos fue el de la señora Susana Montes Rodríguez, mamá de María Guadalupe Pérez Montes, víctima de feminicidio, quien había desaparecido el 31 de enero del 2009.
En entrevista para El Heraldo de Juárez, recordó que a ella le habían entregado un primer dictamen donde querían darle un cuerpo, que según la Fiscalía era el de su hija, pero ella pidió un segundo dictamen, en el que solo le entregaron un cráneo y resultó que el primer cuerpo que le iba a dar era de otra persona.
"Queremos preguntarle a la Fiscalía que es lo que está pasando ahí, no hay ninguna confianza cuando dicen que la caja (el féretro) no se puede abrir, claro que se tiene que abrir", dijo la señora Susana.
Esto, al asegurar que han sabido que en varias ocasiones la funeraria les pide no abrir los ataúdes por supuesta instrucción de la Fiscalía y ahora, con lo que pasó, ya desconfían de las autoridades y les deja en duda cuantos cuerpos pudieron haber entregado mal durante los últimos años.
"Desgraciadamente pasó de que a algunas de las mamás les había entregado equivocadamente el cuerpo y en otro caso pasó que les habían echado basura adentro de la caja", agregó.
Por su parte, la Fiscalía General del Estado y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas descartaron tener algún convenio con la empresa Funeraria Ríos, esto tras el escándalo generado por la entrega de un cuerpo que según las autoridades, pertenecía a Kevin, un menor que sigue desaparecido.