Hasta las 10:30 de la mañana del domingo la Fiscalía General del Estado no ha emitido información alguna sobre lo ocurrido en el Centro de Reinserción Social Estatal No. 3.
Esto ha generado mayor nerviosismo y desesperación entre los familiares de internos, que impacientes esperan noticias de sus seres queridos.
Agentes policíacos señalaron de manera extraoficial que hay por lo menos diez custodios y cuatro reos muertos, además de varios heridos, pero esta información no ha sido confirmada por las autoridades.
A su vez, se mencionó que fue personal del Ejército Mexicano los que controlaron la situación al interior del penal, apoyados por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal y Secretaría de Seguridad Pública Estatal.
Mientras tanto, agentes ministeriales permanecieron solo a la expectativa al exterior del CERESO, en la avenida Barranco Azúl, cuidando el área delimitada cómo escena del crimen.
Cerca de las 10:30 de la mañana ingresaron cinco ambulancias del Departamento de Rescate y la Cruz Roja Mexicana, para el traslado de heridos.
Testigos mantenían la versión de que un comando armado en tres camionetas y un vehículo llegaron a las 6:00 de la mañana, cuando iniciaba el horario de visitas para entrar al reclusorio.
Primero sometieron a las personas formadas al exterior y a los custodios de las casetas principales de entrada, para posteriormente ingresar y desatar una balacera.
Además, a los familiares les mencionaron que entre 30 y 40 internos fueron rescatados del Área 5, dónde se encuentran Los Mexicles, pero tampoco esta información ha sido confirmada.
Finalmente, el grupo armado y los internos escaparon generando otros enfrentamientos en diversos sectores de la ciudad contra agentes policíacos.
Por el momento se han dado a conocer una serie de cateos en varias viviendas del suroriente de la ciudad, dónde opera este grupo delictivo.
