Con motivo de la congregación de cientos de migrantes que acamparon en la puerta 40, ya comenzó la venta de agua, sodas y jugos a precio excesivo.
También algunos extranjeros antes de cruzar el alambre de púas del resguardo del río Bravo, están llevando provisiones por lo que el Del Río del cruce Carlos Villareal Torres y Cuatro Siglos tiene hasta fila de espera.
El permanecer acampando del lado de Estados Unidos, ha provocado que cientos de migrantes no tengan acceso fácil a comprar comida incluso a tomar agua.
Una mujer turca, se acercaba al alambre de púas para solicitar que le ayudarán con agua y comida, ya que desde ayer (jueves) está de lado americano y necesitaba alimentar a su hijo.
Por otro lado, la oportunidad de hacer dinero de migrantes venezolanos, también se dejó ver, pues durante la mañana y tarde hubo personas ofreciendo bebidas.
Una botella de agua de un litro y medio se estaba ofertando en 50 pesos, los refrescos y jugos entre 80 y 100 pesos.
Sin embargo, las altas temperaturas y el sol obligaba a los migrantes a pagar al precio que fuera el agua, especialmente, aquellos que traían menores.
En la tienda de conveniencia conforme avanzaba la mañana, cada vez la fila se acrecentaba más, unos para revender y otros para reabastecerse.