Entre lágrimas y lluvia, palabras de agradecimiento, pancartas, dibujos y flores, esta tarde fue despedido por cientos de juarenses la jirafa Modesto, que durante veintiún años dio alegrías y convivió con los fronterizos que la visitaban en el Parque Central Poniente.
De rodillas y llorando una señora agradeció a Modesto por su tiempo con los fronterizos, ante una fila interminable de personas que le llevaban una flor e inclusive niños le dejaron zanahorias.
La malla que dividía a la jirafa de sus visitantes quedó repleta de pancartas con dibujos y mensajes de “te vamos a extrañar”.
Familias completas acudieron a despedirlo en el Parque Central Poniente, pero principalmente niños.
El cuerpo de Modesto estaba tapado por unas lonas, lugar por donde pasaba la gente haciendo una fila; dejaban una rosa blanca y algunos llevaban figuras de jirafas de peluche.
El graznido de los gansos rompía el silencio en el lugar, además del llanto y algunas expresiones de “Gracias Modesto”.
La lluvia cayó momentáneamente y la gente se resguardó, luego retomaron la fila. Múltiples historias y relatos, como en el caso de Santiago Camacho Haro quien visitó desde los 10 años a Modesto y acompañado de su mamá y su abuelita le llevó un ramo de rosas.