En mayo del 2023 entrará una de las normas NOM-127-SSA1-2021, la cual, marca que se haga una reducción de arsénico a 0.01, por lo que la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS) ha estado trabajando para lograr la reducción que es de 0.025, al igual que otros elementos que tiene el agua.
“Estamos trabajando en eso, hemos detenido seis pozos debido a eso, pero ya tenemos una aplicación pronto les vamos a dar noticias”, comentó Sergio Nevárez, director ejecutivo de la JMAS.
Nevárez, indicó que la reducción de elementos naturales que contienen el agua, se da a un costo muy elevado y se buscará la técnica más económica.
“El costo de la remoción del arsénico todavía está muy cara y JMAS no dispone de tanto recurso por eso estamos buscando una solución en conjunto para agarrar los seis pozos y limpiarlos de una vez”, explicó el director de la descentralizada.
La propuesta de adquirir una planta para remozar el arsénico que contienen el agua de manera natural, sería casi imposible, ya que se tendría que instalar una planta en cada uno de los pozos.
“Tendríamos que poner una planta en cada pozo, el costo es por metro cúbico de agua limpia”, dijo el dirigente de JMAS.
También detalló que en costo aproximado sería 2 millones y medio de dólares por cada planta para remozar cada pozo.
“Se está buscando una solución conjunta con la Junta Central de Agua y saneamiento (JCAS) para remover el arsénico del agua”, comentó Nevárez.