Con el objetivo de tener bien informados a los vecinos que se ven afectados en sus accesos, el personal del departamento de Alcantarillado de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento tuvieron un acercamiento.
Los habitantes del fraccionamiento Paola asistieron a la reunión donde les informaron acerca de los avances y beneficios que recibirán con la construcción del nuevo colector Insurgentes.
La arquitecta Guadalupe Trujillo, jefe de Alcantarillado de la Junta de Agua y Saneamiento de Juárez, la encabezó la charla a la que asistieron alrededor de 50 vecinos.
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A los presentes se les explicó los beneficios que recibirán con la construcción de este nuevo colector, para el que se usa tubería de fibra de vidrio con una vida útil garantizada de más de 50 años.
El nuevo colector se construirá en la calle Artículo 39, entre las avenidas De la Raza y De los Insurgentes, así como por esta última, entre Artículo 39 y avenida Adolfo López Mateos.
Se evitarán los hundimientos que de manera frecuente se han presentado en la avenida De los Insurgentes, con el nuevo colector, debido a que el actual tiene más de 50 años de haber sido instalado y ya cumplió su vida útil.
Para esta obra se asignó a 13 empleados, un encargado, un coordinador, una oruga, dos retroexcavadoras, tres cortadoras, cama baja, tractocamión de volteo, una vactor, una motobomba de 6 pulgadas y equipo de espacios confinados. Se estima que la obra se realizará en 20 semanas.
Para evitar molestias a los residentes del sector, ya se tiene listo al contratista para bachear las calles que se intervendrán, se agregó a la información.
“Este proyecto se realiza para beneficio de ustedes. Se utiliza una nueva tubería más resistente, que se instala de una manera diferente y que permite que el colector tenga ciertas curvaturas sin que sufra deformaciones o quiebres", detalló Trujillo.
"Fuimos capacitados por el fabricante para la instalación de los tubos y la misma empresa nos está supervisando. Usamos una cámara de videoinspección para asegurarnos 100% que nos quede bien. Al final de la obra, van a tener tubería nueva de alcantarillado y de agua potable”, informó la arquitecta Trujillo.
Agregó que la tubería de drenaje se satura porque a ella se arroja el menudo que se quedó, la pelota del niño, basura, tierra, hojas de árboles, llantas y otros desechos, lo que impide su correcto funcionamiento.
