Con la reciente Reforma Judicial en México, surge la preocupación por la creación de Centros de Arbitraje impulsados por grupos de abogados para resolver disputas entre empresas. Alejandro Sandoval Murillo, presidente de la Asociación Nacional de Abogados de Empresas (ANADE), advirtió sobre el riesgo de que estos centros puedan convertirse en "tribunales patito", es decir, sin la debida legitimidad y profesionalismo.
Sandoval Murillo explicó que, si bien la figura de los Centros de Arbitraje ya existe en el país, su uso ha sido limitado debido a los altos costos que conlleva.
"El problema radica en que las microempresas no podrán acceder a estos servicios, dejando a las medianas y grandes empresas como los únicos beneficiarios", comentó.
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Este cambio en el panorama judicial podría generar una mayor presión sobre el sistema de arbitraje, que, según el presidente de ANADE, podría resultar en una disminución de la calidad y seriedad en la resolución de conflictos.
El abogado subrayó la importancia de institucionalizar estos centros, buscando el respaldo de organismos formales como el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y el Consejo para el Desarrollo Económico del Estado de Chihuahua (CODECH). "Esto garantizaría que los árbitros y jueces cuenten con la debida certificación y calificación", señaló.
Además, Sandoval Murillo enfatizó que, aunque el arbitraje promete mayor especialización y certidumbre, su costo sigue siendo un obstáculo significativo para muchas empresas. "Mientras el Poder Judicial continúe siendo una opción más económica, la utilización de estos centros podría verse limitada", añadió.
A nivel nacional, existen ya varios Centros de Arbitraje, como los de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) y el Centro de Arbitraje México (CAM), que, a pesar de su larga trayectoria, han sido poco utilizados.
La implementación de un Centro de Arbitraje en Chihuahua, con mecanismos de certificación claros, podría ser una solución viable para evitar la proliferación de "tribunales patito" y ofrecer un espacio confiable para la resolución de disputas comerciales.
Con la reforma judicial en marcha, el futuro de la resolución de conflictos empresariales en México se encuentra en un punto crítico, donde la calidad y la accesibilidad de los servicios de arbitraje serán claves para su éxito y legitimidad.