La ejecución de un empleado de la funeraria Ramírez, registrada la tarde del sábado en la colonia Ex Hipódromo, puso en alerta al gremio funerario, ante los contantes hechos violentos que se han registrado durante los últimos meses.
Este lamentable caso ocurrió en las calles Porfirio Díaz y Chihuahua, donde fue abatido a tiros el joven identificado solamente como Miguel Ángel, quedando su cuerpo junto a una camioneta Chrysler Town & Country en color blanco, con logos de la empresa funeraria.
Se dijo que el ejecutado era familiar del empleado de la funeraria Camino al Cielo que también fue asesinato a principios del mes de julio del 2021, cuando circulaba a bordo de una carroza propiedad de dicha negociación sobre las avenidas Municipio Libre y Belisario Domínguez.
Esta persona había sido identificada por las autoridades como Samuel Arturo Moreno Vargas, de 24 años de edad, quien quedó sin vida a bordo de la camioneta tipo minivan habilitada para el traslado de cuerpos.
Por si esto fuera poco, a mediados de diciembre del 2021, un trabajador de la Funeraria Renacimiento fue “levantado” por hombres armados en dicha negociación, ubicada en las calles Sevilla e Italia, de la colonia San Antonio.
Afortunadamente, se dijo que está persona había sido liberada varios minutos después, siendo abandonado todo golpeado muy cercas del lugar, sin que se diera a conocer el punto exacto por parte de las autoridades.
Hasta el momento no se cuenta con una hipótesis sobre estos lamentables hechos, ya que se especula que todo pudiera ser resultado del cobro de piso o hasta el narcomenudeo, pero las autoridades no han dado a conocer el móvil o si todos los casos están relacionados entre si.