Aguantando frío, hambre y suplicando a autoridades de la Guardia Nacional de Texas que los dejen entrar es como amaneció el área del Border Safety Initiative Marker (Marcador de Iniciativa de Seguridad Fronteriza/ BSI 36).
La seguridad de varios kilómetros con vallas de 3 metros de altura con alambrado de púas ha contenido a varios grupos migrantes.
Incluso algunos que se encontraban envueltos en cobijas y con fogatas, ya de lado estadounidense, comentaron que están esperando ahí a la orilla del río Bravo desde las 4:00 horas.
Pero no han encontrado una manera de entrar, ya que la alta valla, lleva varios kilómetros de extensión de cada lado del BSI 36.
También se apreció a decenas de personas queriendo empujar la reja y gritando a los oficiales norteamericanos que los ayuden, que les den la oportunidad de entrar, ya que solo buscan trabajar.
El termómetro en Ciudad Juárez esta mañana marcaba entre 9 a 11 grados centígrados; sin embargo, en la franja fronteriza se intensifica la sensación térmica a la baja.
Durante la madrugada cayó un poco de precipitaciones de lluvia y algunos que estaban ahí, sienten más el frío sobre todo cuando pega el viento que lleva fuerza.
La mayoría de los migrantes indicaron haber llegado en la noche, otros en la madrugada y por la mañana, aunque de diferentes maneras unos afirman que llegaron caminando, de aventón y en autobús.