Ciudad Juárez había sido la ruta que miles de migrantes elegían para entregarse a las autoridades de Estados Unidos, incluso se veía como esperaban una oportunidad de cruzar el Río Bravo para buscar un encuentro con la Patrulla Fronteriza, sin embargo, desde hace dos meses aproximadamente, el flujo migratorio se ha reducido considerablemente.
Con la migración a la baja en la frontera entre Ciudad Juárez y el sector de El Paso, los espacios humanitarios que opera el gobierno municipal están con una ocupación por debajo del 50 por ciento.
“Hay una baja en el flujo definitivamente que puede ser ocasionado por múltiples factores”, comentó Santiago González, titular de la dirección municipal de Derechos Humanos.
La reducción de la llegada de migrantes en caravanas o grupos grandes, se puede deber a factores políticos, económicos y sociales o hasta climatológicos, comentó el derechohumanista municipal.
El titular de la dirección de Derechos Humanos comentó que se cuenta con espacio de albergue para seguir recibiendo a migrantes que arriben a esta frontera y busquen un lugar donde pernoctar, sobre todo cuando tienen el deseo de esperar una cita de CBP One.
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“Hay espacio y estamos ordenados en el tema migratorio”, mencionó González, sobre cómo se está desarrollando el flujo migratorio.
Las principales nacionalidades que se encuentran actualmente en los albergues que opera el municipio de Ciudad Juárez son: México, Honduras y Venezuela.
“Hemos tenido algunas llegadas de mexicanos de los estados de Guanajuato y Michoacán, principalmente personas que vienen del sur”, comunicó el derechohumanista.
Con respecto a la llegada de personas repatriadas, Santiago González, indicó que solo es uno que otro los que se encuentran dentro de los albergues, como Kiki Romero, pero principalmente quienes llegan, es gente que va de tránsito al Norte.