En una entrevista exclusiva con la encargada del comedor de la Catedral de Ciudad Juárez, se ha obtenido información sobre el flujo migratorio en la zona y la situación actual del comedor.
Según la encargada, el comedor ha experimentado un aumento significativo en la afluencia de migrantes en los últimos meses. Sin embargo, también ha destacado que este flujo es altamente irregular, lo que dificulta la planificación y la distribución equitativa de recursos. A diario, el comedor atiende a un promedio mínimo de 400 a 500 personas, pero la encargada menciona que esta cifra varía considerablemente dependiendo de diferentes factores.
Uno de los desafíos más grandes que enfrenta el comedor es la dinámica cambiante en la llegada de migrantes a la ciudad. Algunos llegan directamente al río y no pasan por el comedor, mientras que otros arriban en grupos pequeños después de haber viajado en tren o atravesado el río. Esto significa que el número de personas atendidas en el comedor puede fluctuar drásticamente en un solo día.
Además, el comedor opera en rondas, con un límite de 80 personas admitidas en cada área en cada entrada. Una vez que se alcanza este límite, comienza un flujo constante durante todo el día, con aproximadamente 5 o 6 rondas adicionales. Sin embargo, cerca de las 3 de la tarde, el número de personas que llegan en tren puede alcanzar hasta 100 o 150, lo que representa un desafío adicional para el comedor en términos de logística y capacidad de atención.
Estos datos ponen de relieve la complejidad y la variabilidad del flujo migratorio en la frontera entre México y Estados Unidos. El comedor de la Catedral de Ciudad Juárez desempeña un papel crucial al proporcionar alimentos y apoyo a los migrantes que buscan mejorar sus condiciones de vida. Sin embargo, la encargada destaca la necesidad de una mayor coordinación y recursos para hacer frente a esta afluencia irregular y garantizar que todas las personas en situación de vulnerabilidad reciban la atención necesaria.
"La encargada del comedor también ha mencionado que, a pesar de que la cantidad de personas que llegan en trenes ha disminuido en comparación con días anteriores, aún continúan arribando migrantes por esta vía. Aunque el flujo no es tan constante como en el pasado, es evidente que la afluencia sigue incrementando. Esta situación plantea desafíos adicionales para las autoridades y organizaciones que trabajan en la atención y el apoyo a los migrantes.
Además, se ha observado que la procedencia de los migrantes no se limita a un solo país o región. En el comedor de la Catedral, se atiende a personas provenientes de diversos países de Centroamérica y de otros continentes, así como de otras regiones del mundo. Esta diversidad en la nacionalidad de los migrantes refleja la complejidad y la magnitud del fenómeno migratorio en la región.
Ante este escenario, la encargada del comedor ha expresado la importancia de contar con recursos adecuados y un apoyo continuo por parte de la comunidad y las autoridades locales. Destacó la necesidad de establecer una red de colaboración sólida entre las organizaciones que brindan asistencia a los migrantes, así como promover políticas que aborden las causas fundamentales de la migración y brinden soluciones sostenibles.
La información proporcionada por la encargada del comedor de la Catedral de Ciudad Juárez reafirma la realidad del flujo migratorio irregular en la región. A pesar de los desafíos y la creciente afluencia, se hace evidente la necesidad de continuar brindando apoyo a los migrantes y buscar soluciones a largo plazo que aborden las causas subyacentes de este fenómeno."
La situación en Ciudad Juárez sigue siendo un desafío humanitario y requiere una respuesta integral y colaborativa de las autoridades y organizaciones de ayuda.