Después de que al menos dos migrantes originarios de Guatemala quedaran sin vida y otros cuatro heridos durante un ataque protagonizado por elementos del Ejército Mexicano, al ser detectados cuando eran trasladados en una zona arenosa rumbo al muro fronterizo para ser brincados al vecino país, la iglesia señala estos hechos como delicados y una ofensa hacia la vida humana.
El obispo de la Diócesis de Ciudad Juárez, José Guadalupe Torres Campos, pide a las autoridades realizar una investigación minuciosa, para que se dé con los responsables y se apliquen las sanciones correspondientes.
“Es muy preocupante, es una ofensa, es un crimen que tengo entendido que cometieron autoridades militares, que sin más acribillaron a quienes hayan sido, tal vez algunos eran traficantes de personas y otros eran inocentes, migrantes”, externo con preocupación Torres Campos.
“Es un lamentable hecho que esperamos que se tenga justicia para los fallecidos, los lesionados y sobre todo esperamos que no se repitan nuevamente estos casos”, agregó el obispo.
Los hechos se registraron la noche del pasado lunes 09 de octubre en el tramo san Jerónimo-Anapra que hace frontera con Santa Teresa y Sunland Park, en el estado de Nuevo México.
“Exigimos que cualquier homicidio o asesinato debe esclarecerse y deben de rendir cuentas las autoridades, también se pide la prevención y evitar que no sucedan estás masacres”, enfatizó Torres Campos.
En torno a lo sucedido el Fiscal Zona Norte, Carlos Manuel Salas, dio a conocer en rueda de prensa que ya existe una investigación, señalando que la propia Sedena puso a disposición de las autoridades del Ministerio Público a cuatro de los elementos junto con las armas de cargo, mientras que uno quinto militar se encuentra prófugo.
Los lesionados responden a los nombres de: Carlos Humberto Rodríguez López de 19 años, Rigoberto González Chávez de 28 años, Selvin Eduardo García Paredes de 19 años estos tres originarios de Guatemala y Raúl de Jesús Hernández Ramírez de 18 años de edad originario de Honduras; los fallecidos fueron identificados como Elvis Enrique Barrientos de la Rosa de 27 años de edad y Margarito Canto Juárez de 45 años, ambos de nacionalidad Guatemalteca.