Cerca de mil migrantes de distintas nacionalidades, en tan sólo una semana, han sido retornados a Ciudad Juárez, por lo que es probable que en un mes haya más de 5 mil migrantes en esta frontera, sin rumbo fijo.
El pasado jueves 5 de enero, el gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció que se aplicaría Título 42, a personas de Nicaragua, Cuba, Haití y Venezuela.
Al día siguiente autoridades norteamericanas, comenzaron a expulsar más de 100 migrantes diariamente.
Al mediodía, agentes de la Patrulla Fronteriza, acomodan en fila a los migrantes y los entregan a la mitad del puente internacional Reforma, mejor conocido como puente "Lerdo".
Son recibidos por agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), los cuales, extienden permisos denominados Oficios de Salida, que dan 15 días aproximadamente para salir de México.
En el caso de familias con menores que son retornadas, se entregan Oficios por razones humanitarias, los cuales, no tienen tiempo límite para salir del país.
Aunque desde la semana pasada se desplegó el Grupo de Operaciones Especiales Migratorias, por parte de INM, donde agentes resguardan el bordo fronterizo, los migrantes siguieron cruzando el río Bravo para entregarse a la Patrulla Fronteriza.
Las consecuencias de que México, acordó recibir a 30 mil personas retornadas de Estados Unidos, ya se empieza a notar, pues se ve migrantes viviendo en situación de calle, la mayoría no accede a ir a albergues, además se ven venezolanos pidiendo dinero y limpiando vidrios en las calles del centro.