Los debates electorales pueden influir en la preferencia electoral, aunque muchas de las personas que los ven, ya tienen decidido por quién van a votar, habrá quienes pueden cambiar de opinión a la hora de emitir su sufragio.
De acuerdo al analista político, Eduardo Borunda Escobedo consideró que el debate electoral sí impacta en la intención del voto, de acuerdo a la experiencia que han tenido con las investigaciones que ha hecho con las encuestas en su momento derivado a diversos debates a nivel municipal y nacional.
Expuso que los debates han servido para eso históricamente, es decir, que habrá personas que puedan cambiar de opinión al momento de emitir su voto el próximo 2 de junio.
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El próximo 17 de mayo se realizará el debate en Ciudad Juárez donde las candidatas y candidatos de diversos partidos políticos y coaliciones buscarán comunicar sus propuestas a la ciudadanía.
El especialista en el tema electoral recordó una elección donde Diego Fernández de Cevallos ganó un debate y las estrategias, y no se reflejó en el resultado electoral que fue uno de los elementos esenciales.
Mientras que en el estado de Chihuahua hubo un debate donde el candidato en aquel entonces, Ramón Galindo se enoja, vulsifera al aire y eso hace que pierda la intención del voto y seguramente ese fue otro ejemplo de cómo los debates influyen en la intención del voto.
A nivel local, los debates electorales 2024 son planeados y organizados por el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua (IEE) con la finalidad de que sean un instrumento que contribuya a que las ciudadanas y ciudadanos, de manera objetiva y responsable, tomen una decisión libre e informada al emitir su sufragio.
Estos debates fueron diseñados para proporcionar a la ciudadanía un panorama amplio de las propuestas y posturas de las candidatas y candidatos a puestos de elección popular
Borunda Escobedo externó que estos debates presidenciales que hemos tenido en México, han tenido elementos más de confrontación y de descalificación política entre las candidaturas que de propuestas, y que eso ha mermado de que cambie la percepción de por quién van a votar o no van a votar.
“Creo que hay muchas dudas en los electores en cuanto a que, no se observa una candidatura fuerte, que les diga: Me convence cien por ciento esta candidatura o esta otra, es decir, en los sondeos de opinión en las entrevistas que hemos tenido donde analizamos las respuestas de las personas no ven con claridad una buena figura política para que sea el próximo presidente o presidenta del país y van a votar por el menos peor”, aseveró.
Los debates electorales son una plataforma fundamental para la transparencia y el intercambio de ideas en el proceso democrático.
El analista político espera que en el tercer debate presidencial, ideas y propuestas muy concretas, no vagas que permita al electorado, principalmente a ese 12 o 14 por ciento de electores que no han definido todavía a quién le van a entregar su voto, logren convencerse cuál es la idea de la mejor propuesta y definan por quien van a votar.
El antecedente de los debates es en Estados Unidos y de ahí se exporta como una moda, como un requisito para que hubiera una confrontación de ideas sobre todo, para que los que participan en la contienda electoral pudieran presentar sus propuestas y pudieran ser contrastadas las unas con las otras.
Con la realización del debate en Ciudad Juárez, el Instituto Estatal Electoral busca fomentar la pluralidad de puntos de vista y así garantizar el acceso a información sobre las propuestas de las diversas candidaturas, para que la ciudadanía pueda emitir un voto razonado e informado el próximo 2 de junio en las urnas
