Ciudad Juárez: uno de los cuatro corredores de tráfico de personas para la delincuencia organizada

Instituto Nacional de Migración ha realizado operativos para detectar la presencia de migrantes establecimientos considerados como giros negros

Héctor Tovar / El Heraldo de Juárez

  · lunes 9 de septiembre de 2024

Foto: Pixabay @kodiak4

Desafortunadamente, Ciudad Juárez forma parte de uno de uno los cuatro corredores usados por los grupos criminales para la trata de personas, según un estudio publicado por insightcrime.org.

"La trata de personas es una de las economías criminales más complejas del mundo y una de las más incomprendidas, siendo la frontera entre Estados Unidos y México, donde opera un puñado de organizaciones criminales con diversos grados de poder y sofisticación", señala en su informe este organismo.

El primero de estos corredores es el de Tijuana Mexicali, el otro es el del Desierto de Sonora, el tercero el de Ciudad Juárez y por último el de Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, todos con operaciones desde el sur y centro del país.

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De acuerdo con dicho organismo, en nuestra frontera el tráfico de personas está a cargo de las organizaciones criminales que operan en nuestra región, en contubernio con corporaciones policíacas que les brindan protección.

Un mapa muestra cómo las víctimas son llevadas desde el sur de México, en entidades como Tapachula Chiapas, hasta cruzar todo el territorio nacional y llegar a la frontera norte, a través de estos corredores.

Durante el 2018, cuando se dio en Ciudad Juárez el inicio en el arribo de migrantes, algunas mujeres extranjeras, principalmente de origen cubano, comenzaron a trabajar en bares y centros nocturnos.

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Ante esto, autoridades como el Instituto Nacional de Migración ha realizado operativos para detectar la presencia de migrantes establecimientos considerados como giros negros, para evitar la explotación y secuestros.

Incluso, en casos como el del Arroyo del Navajo, una de las líneas de investigación apuntaba al tráfico de personas en el móvil del asesinato de las jóvenes desaparecidas, durante el periodo del 2008 al 2012, según las autoridades.