Ante el atraso en el pago de las cuotas de agremiados de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), la nueva Presidente, Isela Molina, planea tener un acercamiento con estos empresarios.
Ella buscará atraer de nuevo a los afiliados, pero aclaró que no son deudores, ya que las aportaciones son voluntarias más no obligatorias.
La intención es convencerlos de que se pongan al corriente e inspirados para que participen en la cámara y así, fortalecerla y consolidarla.
Por ende, los motivarán para que se vuelvan a conectar a CANACINTRA con los servicios y eventos que se estarán ofreciendo, haciéndola más llamativa
A su vez, se pretende hacerles saber que solo integrándose y participando es como podrán mejorar las cosas en beneficio de todos, según lo dio a conocer la también empresaria.
Lamentablemente, en las pasadas elecciones de CANACINTRA solo pudieron participar 80 afiliados, de los 130 que se tenían proyectados esto por lo pagar sus cuotas.
De acuerdo con lo señalado, solo los agremiados que estuvieran al corriente podrían participar y tomar decisiones en el rumbo de la cámara, por lo que fueron muy pocos los que pudieron hacerlo.
Para inicios de la primera administración de Jesús Manuel Salayandía, se tenía un aproximado de 800 afiliados a CANACINTRA pero la gran mayoría no estaba al corriente en sus aportaciones.