Andy espera que en estos días Estados Unidos deje una brecha para que venezolanos como él, puedan ingresar de manera regular, pero de no ser así, en los próximos días se olvidará de ese sueño que venía persiguiendo y comenzará a buscar trabajo en Ciudad Juárez.
El venezolano era gerente de una panadería en su tierra natal, él empezó desde los 16 años a trabajar en el negocio que instalaron unos alemanes, por lo que conoce bien el oficio tras dedicarse a hacer pan desde hace 17 años.
El migrante llegó a Ciudad Juárez con un grupo de 15 personas, todas son familia, pero la desesperación tras la incertidumbre los está alcanzando.
“Una de mis opciones es trabajar aquí, dicen que van a eliminar el Título 42, pero seguramente van a salir con otra política para perjudicarnos, en noviembre dijeron que lo eliminaron y solo fue una trampa, seguramente esta vez lo harán igual, lo peor es que nos sacan hasta Tapachula, eso que hacen es una maldad”, opinó Andy.
El venezolano comentó que, si él hubiera sabido que Estados Unidos les iba a cerrar la puerta en la cara, no hubiera dejado en su país natal a su esposa y tres hijas de 5, 13 y 14 años de edad, aunque no tuvieran que comer.
“Yo creo me voy a informar para pedir refugio en México, ya no tengo dinero, mi familia en Venezuela se la está viendo ruda, espero que esta lucha no sea en vano, yo soy completamente opositor a mi gobierno, si nos regalan el departamento, pero uno tiene que estar a la mano para lo que ellos quieran y cuándo ellos te llamen”, contó Andy.
Aunado a toda la problemática que el venezolano está pasando en Juárez, tiene problemas de asma, por lo que el frío lo ha tomado de sorpresa y comenzó a sentir malestares respiratorios, se ha cuidado, pero nunca había sentido esa sensación tan gélida.
De no poder ingresar a la vecina ciudad, el venezolano, optará por el refugio en México, solo esperará el fin de año para tomar su decisión.
