El Centro Integrador Leona Vicario sigue negando la entrada a migrantes que van llegando debido a que sus instalaciones permanecen totalmente llenas.
Desde el martes pasado más de 50 migrantes estuvieron esperando les dieran albergue, incluso algunos con niños pero no lograron ingresar.
Los migrantes señalaron que el personal del lugar les dijo que estaban llenos y no había espacio para poder ingresar al albergue, por lo que tuvieron que pasar la noche al exterior.
En un recorrido por el albergue este fin de semana, sólo permanecen, si mucho 10 personas extranjeras, pues no saben a dónde dirigirse para resguardarse.
Pero mantienen la esperanza que les den un espacio, ya que han argumentado que diariamente salen hasta 30 familias o parejas que van a su cita de CBP One.
También otros migrantes han encontrado su propia oportunidad de ir a vivir a una casa en diferentes puntos de la ciudad, por lo que desistieron de pedir asilo.
En repetidas ocasiones, autoridades federales, estatales y municipales han declarado que hay espacio y trabajo para migrantes.
Sin embargo, en las afueras del Centro Integrador Leona Vicario se anuncia con cartulinas que no hay espacio que están lleno y tampoco se ha acercado el Instituto Nacional de Migración para redireccionarlos al Centro de Atención Integral para Migrantes.