Día a día, periodistas y comunicadores que cubren la fuente policíaca son acosados por elementos de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano que constantemente les piden sus datos personales y hasta les toman fotografía durante el desempeño de su trabajo.
Desde el nombre, lugar donde trabajan, vehículo que utilizan y hasta la dirección de su vivienda, es la información que solicitan en cada uno de los eventos policíacos que se cubren en la ciudad, sin que den una razón de para que son utilizados estos datos.
Incluso, durante la cobertura de una mujer ejecutada en la colonia Juárez la noche del miércoles, los militares y los de la GN llegaron a preguntar el número de placas de las unidades utilizadas por los periodistas, así como características, marca, modelo y color.
Meses atrás, fotoperiodistas que cubren la incidencia de migrantes en el bordo del Río Bravo, ya habían expresado su malestar, de manera anónima, ya que constantemente eran acosados por las fuerzas federales, que buscaban impedir que realizaran su trabajo.
Sin embargo, este comportamiento ha causado inquietud entre los comunicadores, ante los más recientes homicidios de compañeros periodistas en el país que en su mayoría están relacionados con el ejercicio de su profesión.
Hasta el momento ni el Ejército Mexicano ni la GN han emitido una postura del motivo por el cual se solicita está información a los medios de comunicación de manera constante, todos los días y en cada hecho policiaco.