Decenas de familias se reencontraron por unos minutos con sus seres queridos que viven en Estados Unidos y no se han visto por problemas migratorios.
En esta ocasión, el evento llamado “Abrazos No Muros” organizado por la Red Fronteriza por los Derechos Humanos, se llevó a cabo en los límites del río Bravo entre Ciudad Juárez y El Paso, Texas, pero también parte de territorio del estado norteamericano de Nuevo México.
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Familias completas se encontraron para abrazarse con sus familiares quienes lloraron de alegría, ya que muchos tenías años de no verse en persona, sólo se comunicaban por teléfono a través de vídeo llamada.
El director de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos, Fernando García, expuso que debido a las restricciones que implementó el gobernador de Texas, Greg Abbott con la presencia de la Guardia Nacional texana y los alambres de púas en el bordo del río Bravo entre El Paso Texas y Ciudad Juárez, se decidió de último momento realizarlo donde empieza el río Bravo de lado mexicano, es decir, en los límites de los estados de Nuevo México, Texas y Chihuahua.
“Es un evento que ha sido difícil este año, esta es la décima ocasión, pero nunca lo hemos hecho en las condiciones en las que está estamos, en donde nunca hemos tenido una frontera tan militarizada como estamos ahorita”, sentenció.
Señaló que tenemos el río Bravo y de lado de Estados Unidos está la militarización, cercas, muros, soldados, armas y del otro lado una familia refugiada migrante y esa es la foto de la frontera.
“Quiero pensar que los gobiernos no saben la consecuencia de lo que están haciendo, lo que están haciendo no solo separando familias, sino teniendo un profundo impacto en la vida fronteriza”, sentenció.
Aseveró que El Paso y Juárez ya no es lo mismo que lo que era hace 40 años, ya que esta comunidad está más dividida que nunca.
El evento Abrazos No Muros que inició desde el año 2016, trae un poco de luz y esperanza, es un evento de humanidad, de amor, pero también es un evento de protesta ante toda esta política irracional, hay una guerra contra los migrantes, contra los refugiados, contra los mismos fronterizos y eso es una guerra declarada.
Roberto Falcón Vázquez llegó a los límites del río Bravo junto con su familia con el único objetivo de ver a su mamá que no vea desde hace seis años, ya que no puede cruzar a Estados Unidos para ver a su ser querido.
Con los ojos con lágrimas Roberto que vive en la colonia División del Norte, dijo que este evento es muy padre, ya que vale la pena cada minuto que están en el bordo del río Bravo para encontrarse con su mamá.
El presidente municipal, Cruz Pérez Cuéllar reconoció a la Red Fronteriza por todo el esfuerzo que hace por unir a las familias y el esfuerzo que hacen en favor de las personas que lucha para tener una mejor vida.
Reiteró su ofrecimiento para apoyar este tipo de eventos y cualquier tema que se ofrezca.